Este blog busca difundir algunas fuentes de la obra vygotskiana publicada en español, así como traducir algunos artículos editados en revistas y libros o bajados de la red; todo relacionado con Vygotski.

sábado, 29 de febrero de 2020

Silvonen



El discurso plural de Vygotski sobre la mente humana
Jussi Silvonen
En: Piaget is dead, Vygotsky is still alive, or? P. Aunio, M. Jahnukainen, M. Kalland & J. Silvonen (Eds.). Finland: Jyväskylä University Press, 2010, pp. 37-59

Traducción: Efraín Aguilar

“To define a problem of investigation means not only to determine its specific subject matter, not only to find a question that needs to be clarified, but, first and foremost, to become cognitively aware of the theoretical task” A. N. Leont’ev 1935 (Leont’ev 1995).

Louis Althusser reclama en sus trabajos sobre Marx y Freud que ambos establecieron una ciencia nueva, diferente de la ciencia moderna clásica (Althusser 1996). Ambos fueron, de acuerdo con Althusser, críticos de la filosofía cartesiana de la consciencia. Althusser señala que moverse hacia una nueva ciencia requiere una ruptura epistemológica con la vieja. Esta ruptura nunca es fácil y no sucede en los primeros pasos de la nueva. Al contrario: “La juventud de una ciencia es su madurez: antes de esa edad es vieja, al tener la edad de los prejuicios sobre los que vive” (Althusser 1996, 19). La nueva ciencia comienza con los  conceptos prestados por las viejas teorías, y por esto la línea de demarcación entre la ciencia vieja y la nueva está dentro de la nueva teoría. La nueva ciencia logra su juventud en sus viejos tiempos.

En este artículo pregunto si podemos aprender algo leyendo a los clásicos de la tradición cultural-histórica, como Althusser,2 como textos de contradicciones y transformaciones epistémicas. En realidad, este fue también el abordaje de Vygotski a la ciencia, que debe entenderse "dialécticamente en su movimiento, es decir, desde la perspectiva de su dinámica, crecimiento, desarrollo, evolución" (Vygotsky 1997b, 292). Para Vygotski, el concepto de desarrollo no incluye "solo cambios evolutivos, sino también revolucionarios, regresión, brechas, zigzags y conflictos" (Vygotsky 1997c, 221).

2 El concepto de ruptura epistemológica se remonta a los estudios de Bachelard y Canguilhem (Bachelard 1987; Canguilhem 1979) y ha sido ampliamente utilizado en el post-estructuralismo francés (Bourdieu 1988; Foucault 1991a).

¿Cómo se relaciona la teoría de Vygotski con la ciencia moderna en general y, en particular, con la psicología moderna? Hoy en día, se afirma ampliamente que la teoría de Vygotski representa una transición de la psicología "clásica" a la "no clásica" (Asmolov 1998; El’konin 2001; Robbins & Stetsenko 2002; Zinchenko 2001). ¿Cómo realmente ocurre esta transición a una psicología no clásica (u " orgánica")? ¿Cómo se relacionan las posibles rupturas en el trabajo de Vygotski con nuestras disputas actuales sobre la continuidad y la discontinuidad entre figuras clave de la escuela de Vygotski? Me centraré aquí en dos preguntas: cómo es la transición de lo antiguo a lo nuevo aparente en el trabajo de Vygotski y cómo están relacionados los cambios en su trabajo con nuestras discusiones actuales. Intento seguir la problemática del trabajo de Vygotski, el cambio y el desarrollo de su lenguaje científico, orientación metodológica, modelos explicativos y su "nomenclatura y terminología" (Vygotsky 1997b, 281), y relacionarlos con el desarrollo de la concepción de mediación semiótica de Vygotski.

Distinguiré la teoría de Vygotski en tres fases: una fase socio-conductual del joven Vygotski, la fase fundacional de la psicología histórico-cultural (CHP1) y el trabajo tardío de Vygotsky (CHP2).3 Al hacer estas distinciones, estoy usando la idea de rupturas epistemológicas en el sentido que Michel Foucault la usa. Foucault afirma en su Arqueología del Conocimiento que el concepto de ruptura epistemológica de Althusser simplifica las cosas suponiendo que hay un punto en el que ocurre la ruptura. Según Foucault, hay varios umbrales de discontinuidad en el desarrollo de la ciencia. El primero es el umbral del discurso positivo, un momento en el que el discurso alcanza su individualidad y autonomía; el segundo es el umbral de la epistemología donde se articulan las reglas y normas para la verificación del conocimiento; el tercero es el umbral de la ciencia, una fase de establecimiento de reglas y leyes para la formación de proposiciones y el último es el umbral de la formalización, después del cual se forman las vías y estrategias para la legitimación del discurso (Foucault 1991a, 186-189) .

3 Para la periodización del trabajo de Vygotski ver (Bozhovich 1977; Keiler 2002; Kozulin 1990a; Langford 2005; Minick 1987; Veresov 1999, 2005; Wertsch 1985). Podría ser posible dividir la primera fase en varios subperíodos, como lo hacen Keiler y Langford, pero para mis necesidades analíticas aquí no es necesario.

En el caso de Vygotski, veremos cómo la continuidad temática en un plano está relacionada de manera muy complicada con las discontinuidades en otros planos del desarrollo de su aparato teórico. El reconocimiento de esta dialéctica de categorías también nos ayuda a comprender la historia más amplia de la tradición histórico-cultural, que está llena de giros y vueltas, lejos de un simple progreso lineal de una generación a otra.4

4 Por ejemplo, el modelo de tres generaciones de la teoría de la actividad (Engestrom 1996) representa, en mi lectura, una reflexión perdida sobre los movimientos conceptuales del trabajo de Vygotski.

Socio-conductismo y el problema de la consciencia

La primera fase del pensamiento de Vygotski, que llamo aquí socio-conductismo,5 incluye sus trabajos pre histórico-culturales hasta 1927, desde los primeros escritos y los primeros libros Psicología del Arte (Vygotsky 1971) y Psicología educativa (Vygotsky 1997) hasta su ensayo sobre La crisis de la psicología (Vygotsky 1997b). Durante este período, Vygotski define la conciencia como el objeto de sus estudios (discurso positivo), pero lo hace en un marco explicativo socio-conductista (barrera epistemológica) que obviamente contradice su objetivo de desarrollar una psicología cultural genuina.

5 La similitud entre Mead y Vygotski es obvia, pero la afirmación de Kozulin de que Vygotski es simplemente una versión rusa de Mead (Kozulin 1986, 265) puede aplicarse adecuadamente solo a este primer período del pensamiento de Vygotski.

Según Vygotski, la conciencia no puede ser omitida sin distorsionar el objeto de investigación de la psicología. A este respecto, hace una nota crítica sobre su conductismo contemporáneo. “La cuestión de la naturaleza psicológica de la conciencia se evita de manera persistente y deliberada en nuestra literatura científica. Se hacen intentos además para no prestarle atención, como si no existiera para la nueva psicología. Al ignorar el problema de la conciencia, la psicología se ha privado del acceso al estudio de algunos problemas bastante complejos del comportamiento humano. Se ve obligada a limitarse a explicar no más que las conexiones más elementales entre un ser vivo y el mundo". (Vygotsky 1997a, 63; 1999a, 256.) Para comprender la actividad humana tenemos que aceptar la conciencia como un fenómeno en sí mismo, que tiene su base en la interacción social entre los seres humanos, y especialmente en el habla.

Vygotski conceptualiza aquí tanto la interacción como el habla en términos de reflejos de reacción especiales, que también llama reflejos reversibles. Estos son reflejos a irritantes que a su vez pueden ser creados por el hombre. “Una palabra que se escucha es el irritante, y una palabra que se pronuncia es un reflejo que produce el mismo irritante. El reflejo es reversible aquí, ya que un irritante puede convertirse en una reacción, y viceversa”. (Vygotsky 1997a, 77.). En la concepción de Vygotski, estos reflejos reversibles constituyen la base del comportamiento social y sirven para la coordinación colectiva de la actividad. Los reflejos que provienen de otras personas tienen un papel especial, porque “me hacen comparable con otro y hacen que mis acciones sean idénticas entre sí. De hecho, en sentido amplio, podemos decir que la fuente del comportamiento social y la conciencia reside en el habla". (Vygotsky 1997a, 77. Énfasis añadido.) Por lo tanto, según Vygotski, la conciencia es un problema real en la psicología humana, por lo que no podemos excluirla de nuestro vocabulario científico.

Simultáneamente, Vygotski enfatiza la objetividad de su enfoque y deja en claro la necesidad de una psicología objetiva:

 "La psicología científica debe materializar [los hechos de la conciencia], traducir lo que existe objetivamente a un lenguaje objetivo, y de una vez por todas desenmascarar y enterrar las ficciones, fantasmagorías, etc." (Vygotsky 1997a, 67). Aquí Vygotski entiende la personalidad humana como "totalmente determinada por el entorno social" y afirma que "la experiencia personal se forma y organiza como una copia de la organización de los diversos elementos del entorno" (Vygotsky 1997g, 157-158).

En consecuencia, el problema de la mente se "resuelve sin desperdicio de energía" y, además, la conciencia se "reduce totalmente a los mecanismos de transmisión de los reflejos que operan de acuerdo con las leyes generales". Vygotski concluye que no necesitamos asumir ningún otro proceso excepto reflejos y reacciones para explicar todo el mecanismo de la mente humana (Vygotsky 1997a, 73). La problemática cartesiana se resuelve aquí omitiendo la psique activa, o al usar la expresión de Merlin Donald, la conciencia se explica al explicarla (Donald 1991).

Aquí el contexto teórico del discurso de Vygotski es explícitamente el conductismo (teoría del reflejo pavloviano, reactología, reflexología y conductismo estadounidense). Está comprometido con el conductismo, con sus conceptos y con el intento de crear una psicología objetiva. Esto se refleja claramente en los títulos de sus presentaciones de este período: Los métodos de investigación reflexológica y psicológica (Vygotsky 1997e) y La conciencia como un problema para la psicología del comportamiento (Vygotsky 1997a). Sin embargo, quiere hacer de la conciencia un objeto central de la psicología, lo que obviamente contradice su vocabulario conductista.

Las categorías explicativas y la definición del tema de investigación aparentemente no están en equilibrio. Esta "resistencia del objeto" (Holzkamp 2006) resulta más tarde como una reformulación de los conceptos explicativos. El vocabulario conductista forma una barrera epistemológica, que debe superarse para hacer posibles los pasos teóricos hacia adelante.

Como una reflexión sobre este problema, Vygotski afirmó en 1926 que la psicología marxista puede "solo hasta cierto punto" (Vygotsky 1997i, 81) seguir el camino del conductismo estadounidense y la reflexología rusa. El punto de referencia teórico de Vygotski ahora cambia del conductismo a la psicología gestáltica. Afirma optimistamente que las fuerzas impulsoras objetivas e inmanentes de la ciencia psicológica actúan "en la misma dirección que la reforma marxista de la psicología" (Vygotsky 1997i, 81). El análisis de Vygotski de la crisis metodológica de la "psicología internacional" es un trabajo de transición del socio-conductismo al marco histórico cultural.

En su ensayo sobre la crisis de la psicología, Vygotski concluye que la única solución positiva para la crisis puede ser la construcción del "materialismo psicológico" (Vygotsky 1997b, 332), que continúa la línea feuerbachiana en psicología.6 Lo que se necesita es una  metodología para un genuino materialismo psicológico. "Si la psicología es posible como ciencia es, sobre todo, un problema metodológico" (Vygotsky 1997b, 328). Vygotski halla el modelo para la nueva metodología, el método genético-funcional, en Das Kapital de Marx.7 Marx comienza su análisis del modo de producción capitalista a partir de la forma mercantil de los bienes y deriva de esta forma todas las leyes generales que guían la economía de mercado. El "germen genético" abre todos los misterios de todo el modo especial de producción. Vygotski declara que así es como debe proceder la psicología. Tiene que encontrar el "germen", el punto histórico desde el cual se hace posible una comprensión del desarrollo de la psique. "El que pueda descifrar el significado de la célula de la psicología, el mecanismo de una reacción, ha encontrado la clave de toda psicología" (Vygotsky 1997b, 320. Énfasis añadido).

6 Keiler (1999) es una excelente introducción sobre la influencia de Feuerbach en el pensamiento de Vygotski.

7 La lectura de Vygotski sobre Marx estaba por delante de sus contemporáneos marxistas. Véanse las críticas al marxismo contemporáneo en crisis (pp. 313–314). Su reconstrucción del método de Marx presagia el renacimiento de Marx en las décadas de 1960 y 1970 (Althusser 1970; Ilyenkov 1982; Mamardashvili 1987; Reichelt 1973; Rosdolsky 1972; Zeleny 1973).

La última oración arriba muestra claramente una contradicción en el ensayo de la Crisis. Por un lado, Vygotski está hablando sobre "el mecanismo de una reacción", manteniéndose en el antiguo vocabulario del socio-conductismo. Por otro lado, simultáneamente, realiza un movimiento esencial y definitivo en su metodología, al inventar el modo de explicación histórico-genético. Ahora la génesis, el surgimiento y el desarrollo son el foco central de su teoría. La idea del desarrollo como actividad mediada se explicará en la teoría histórica de las funciones mentales superiores.

Teoría histórico-cultural I – instrumentalismo

Aquí Vygotski está interesado en la diferencia específica de la mente humana, en su naturaleza culturalmente mediada y en la capacidad de los humanos para dominar sus propias actividades. Ahora surge la pregunta de cómo es posible esta actividad autodirigida y cuál es la función del signo en ella. La primera respuesta de Vygotski es que el signo es una herramienta, un instrumento del comportamiento humano. Desarrolló este argumento alrededor de 1928 y está muy claramente presente en su artículo El problema del desarrollo cultural de (el) niño, así como en algunos otros documentos paralelos (Vygotski 1929; Vygotski 1929a, 1929b; Vygotsky 1989a, Vygotsky 1997c).

Vygotski ilustra la idea de una act(ividad) mediada con una figura triangular que aclara muy bien su primera interpretación instrumental de los signos.

Figura 1. Acto mediado (Vygotsky 1997e, 86)

Haré dos comentarios sobre este triángulo. Primero, con este modelo, Vygotski se separa del conductismo y presenta un modelo cultural mediacional, o quizás uno podría decir, el primer modelo realmente mediacional de la mente humana. En segundo lugar, la concepción del signo se presenta aquí solo en el sentido de un signo instrumental similar a una herramienta. Hay cierta ambivalencia, incluso incongruencia en esta concepción.

Ofreceré una breve aclaración para el primer punto. Vygotski hace una analogía entre herramientas e instrumentos psicológicos, que también llama herramientas psicológicas artificiales. Por su naturaleza, son dispositivos sociales y no orgánicos. Están "dirigidos hacia el dominio de los procesos (mentales), propios o ajenos, así como los dispositivos técnicos están dirigidos hacia el dominio de los procesos de la naturaleza" (Vygotsky 1997d, 85. Énfasis añadido).

El signo como herramienta reorganiza toda la estructura de las funciones psicológicas. Forma un centro estructural, que determina la composición de las funciones y la importancia relativa de cada proceso por separado.

"La inclusión de un signo en cualquier proceso remodela toda la estructura de las operaciones psicológicas", así como la inclusión de una herramienta reorganiza toda la estructura de un proceso de trabajo (Vygotski 1929, 421).

En este modelo, la mediación se entiende como un ser-en-el-mundo. Por lo tanto, la mediación no significa una división entre el hombre y el mundo externo, sino que, por el contrario, indica un análisis de la existencia de un agente en el mundo. La actividad mediacional es un proceso por el cual un individuo adapta la esencia humana y se socializa.8 En este sentido, Vygotski dice que la psicología debe reconquistar el derecho a examinar al individuo "como un microcosmos social - como una expresión o medida de la sociedad" (Vygotsky 1997b, 317). Este es un enfoque no individualista hacia el ser social de una persona individual.

8 Engestrom parece perder este punto. “En los primeros trabajos de la escuela histórico-cultural, dirigida por Vygotski, la unidad de análisis era la acción orientada a objetos mediada por herramientas y signos culturales (ver Vygotsky 1978, 40). La mediación de otros seres humanos y las relaciones sociales no se integraron teóricamente en el modelo triangular de acción" (Engestrom y Miettinen 1999, 4). Los signos son portadores de "los otros" (El’konin 2001) y, respectivamente, la mediación de signos es siempre una mediación social per se.

Echemos un vistazo más de cerca al segundo punto. Vygotski no le da un papel cualitativamente nuevo a las herramientas psicológicas, son como cualquier otra herramienta. "No debemos concebir los actos artificiales (instrumentales) como actos sobrenaturales o metanaturales de acuerdo con algunas leyes nuevas y especiales". Los actos artificiales también son naturales. Pueden sin excepción, hasta el final, descomponerse y reducirse a los naturales, al igual que cualquier máquina (o herramienta técnica) puede, sin excepción, "descomponerse en un sistema de fuerzas y procesos naturales" (Vygotsky 1997d, 86)

Las formas superiores de conducta"no tienen más medios y datos a su disposición que los que se muestran en las formas inferiores de esa misma actividad" (Vygotski 1929, 418).

Este argumento instrumental de la naturaleza de los signos también se hace de manera muy explícita en el Ensayo de la historia del comportamiento. Vygotski y Luria están usando en este texto el concepto de rearmado para describir el mecanismo cultural del desarrollo. Mientras se desarrolla, el niño no solo crece y madura, sino que también recibe una serie de nuevas habilidades y nuevas formas de comportamiento. En el proceso del desarrollo, “el niño no solo madura, sino que se vuelve a armar. Es esta "reorganización" la que explica gran parte del desarrollo y los cambios que podemos observar a medida que seguimos la transición de niño a adulto civilizado" (Luria y Vygotsky 1992, 110). Estos dispositivos conductuales, adquiridos por el niño en el proceso del desarrollo cultural, "alteran las funciones psicológicas fundamentales del niño, lo arman con nuevas armas y las desarrollan" (Luria y Vygotsky 1992, 117. Énfasis añadido). Vygotski afirma en Psicología humana concreta en 1929: "La esencia de la inteligencia reside en las herramientas" (Vygotsky 1989a). Al hablar sobre el rearmado, sobre las armas del desarrollo, enfatiza muy claramente la interpretación instrumental de la función de signos de una herramienta.

Vygotski conceptualizó en la primera fase de su teoría histórico-cultural la mediación del signo en términos de las herramientas psicológicas como instrumentos.

Este fue también el trasfondo conceptual de la metodología experimental de Vygotski. El método de la doble estimulación (Luria y Vygotsky 1992; Sakharov 1994; Vygotsky 1987) está influido por el supuesto de que los signos secundarios incluidos en las operaciones psicológicas son instrumentos o herramientas para el individuo que actúa. La interiorización, según esta interpretación, es un proceso directo de mover las herramientas de signos externas a las internas. Leóntiev en su importante estudio de la memoria en 1931 aclara este punto: "Solo a través de una especie de proceso de "crecimiento interno" se convierten en símbolos internos" y, de esta manera, en funciones psicológicas superiores (Leont’ev 1981, 363).

El concepto de la herramienta psicológica es un fenómeno de transición (Keiler 1999, 2002); al usarlo, Vygotski logra un avance del socio-conductismo al análisis mediacional y, por lo tanto, cultural. Sin embargo, su comprensión de la función del signo cambia radicalmente en el próximo paso del desarrollo de su teoría, como veremos.

Teoría histórico-cultural II – semiótica

En sus últimos trabajos, Vygotski reevalúa el concepto de personalidad (ya en 1930, Vygotsky 1997f), incluye la idea del sujeto experimental en su marco teórico (Vygotsky 1994, 1998) y finalmente reformula el concepto de signo (Vygotsky 1987, 1997h). El concepto de la zona de desarrollo próximo como una especificación de la ley sociogenética aparece solo en esta última fase de su pensamiento (Chaiklin 2003). En el plano metodológico podemos ver una transición del método instrumental al análisis semiótico. Me concentraré aquí en los cambios en su concepto de signo.

El hecho de que dos conceptos de signo, instrumental y semiótico, estén presentes en esta fase simultáneamente uno al lado del otro en el trabajo de Vygotski, hace que sea extremadamente difícil reconstruir su argumentación. Sin embargo, me parece que la interpretación semiótica toma el papel dominante en los últimos trabajos de Vygotski. En consecuencia, aquí afirmo que solo la transición del concepto de signo instrumental al semiótico completa el cambio del socio-conductismo a la psicología cultural-histórica madura.

En la Historia del desarrollo de funciones mentales superiores (Vygotsky 1997c) Vygotski da otra imagen de la actividad mediada. En esta imagen simplemente diseña la actividad mediada en dos grupos: uno mediado por herramientas, otro mediado por el signo.

Vygotski enfatiza que "El hecho central de nuestra psicología es el hecho de la mediación" (Vygotsky 1997h, 138). Ahora falta el concepto de herramientas psicológicas, las funciones superiores se definen como algo cualitativamente nuevo que no se puede reducir a las inferiores, y la mediación se analiza desde el punto de vista de las interacciones sociales mediadas por signos.

Signo y significado

Si las formas inferiores de actividad se caracterizan por la inmediatez de los procesos psicológicos, las funciones psicológicas superiores se caracterizan por la mediación de los signos. La consecuencia de esta idea de mediación es que todos los enfoques metodológicos que se basan en el postulado de la inmediatez (o en el "postulado de lo directo", Leont’ev 1978, 47) no pueden explicar la naturaleza específica de las acciones humanas. Esta es también la razón por la cual el análisis teórico de la naturaleza misma de la mediación es tan importante para Vygotski. Está claro para él que la mediación de los signos "es la característica distintiva más importante de todas las funciones mentales superiores" (Vygotsky 1999b, 41), y que las funciones psicológicas superiores deben definirse como "una formación mental cualitativamente nueva que se desarrolla de acuerdo con leyes especiales y está sujeto a patrones completamente diferentes” en comparación con los inferiores (Vygotsky 1998, 34. Énfasis añadido). El uso de signos da como resultado una estructura de comportamiento completamente nueva y específica en el hombre, una estructura que rompe con las tradiciones del comportamiento natural y crea nuevas formas de actividad psicológica cultural (Vygotsky 1999b, 47).

Figura 2. Formas de actividad mediada (Vygotsky 1997d, 62)

Entre 1932–1933 Vygotski reevaluó los conceptos de significado y signo. En un seminario de su grupo de investigación afirmó que la naturaleza social del signo no se entendía correctamente en los trabajos anteriores del grupo. "(Introducción: la importancia del signo; su significado social.) En trabajos más antiguos ignoramos que el signo tiene un significado… Partimos del principio de la constancia del significado, descontamos el significado… Mientras que antes nuestra tarea era demostrar lo que ‘el nudo’ y la memoria lógica tienen en común, ahora nuestra tarea es demostrar la diferencia que existe entre ellos" (Vygotsky 1997h, 134). No hay signo sin significado. “La formación del significado es la función principal del signo. El significado está en todas partes donde hay un signo... el significado es inherente al signo" (Vygotsky 1997h, 134, 136). Aquí el foco del análisis se mueve desde que el signo es un instrumento, al signo como un contenedor de significado.

Mediante la formación de funciones psicológicas superiores surgirá una nueva forma de actividad, la actividad libre. La acción libre es independiente de las necesidades inmediatas y del estímulo del medio ambiente. La acción libre es proactiva, dirigida al futuro. La posibilidad de acción libre depende del uso de signos (Vygotsky 1999b, 64–65).

La inclusión de funciones simbólicas en la operación psicológica crea condiciones para una conexión de elementos entre el presente y el futuro, lo que crea "un campo psicológico completamente nuevo para la acción" (Vygotsky 1999b, 35. Énfasis agregado) que conduce a la formación de la intención y de una acción-objetivo planificada de antemano. Esta nueva relación de la acción con la personalidad, que surge debido a la palabra y conduce al dominio de la acción, se manifiesta en la acción libre, controlada y dirigida por la palabra. “Si el acto, independiente de la palabra, se encuentra al comienzo del desarrollo, entonces al final se encuentra la palabra convirtiéndose en el acto. La palabra que libera la acción del hombre. (Vygotsky 1999b, 67–68) .9

9 Ver Jones (2002) para un análisis más detallado de la accion libre en Vygotski.

Según Vygotski, el habla es el medio por el cual aprendemos a dominar nuestro comportamiento y nos libera de la influencia inmediata (estímulo) del medio ambiente. “La palabra subordina las reacciones motoras a sí misma; esta es la fuente del poder de la palabra sobre el comportamiento” (Vygotsky 1998, 169. Énfasis añadido).

El análisis de la unidad signo-significado lleva al concepto de significado de la palabra, que luego se convierte en una categoría central en Pensamiento y Habla.10 Esto lleva a la idea de la naturaleza semántica y sistémica de la mente. "La conciencia como un todo tiene una estructura semántica", por eso "el análisis semiótico es el único método adecuado para el estudio de la estructura sistémica y semántica de la conciencia" (Vygotsky 1997h, 137). En consecuencia, el método de la psicología cultural “debe ser el del análisis semántico. Nuestro método debe basarse en el análisis del aspecto significativo del habla; debe ser un método para estudiar el significado verbal" (Vygotsky 1987, 47.).11

10 Jim Wertsch afirma que hay dos concepciones diferentes del significado de las palabras una al lado de la otra en el pensamiento y el lenguaje (capítulo 5 versus capítulo 6) (Wertsch 1996).

11 Kozulin traduce: "Claramente, entonces, el método a seguir es el análisis semántico: el estudio del desarrollo, el funcionamiento y la estructura de [el significado de la palabra], que contiene el pensamiento y el habla interrelacionados" (Vygotsky 1989b, 6).

Vygotski afirma que la función principal del habla es la comunicación, la interacción social. La comunicación requiere signos y significados. Esto nos lleva de vuelta a la cuestión de la internalización y a las relaciones entre el signo, el significado y la interacción.

Signo, la zona del desarrollo próximo y la mente dialógica

En el plano de la ontogénesis, "las relaciones sociales, las relaciones reales de las personas, están detrás de todas las funciones superiores y sus relaciones" (Vygotsky 1997c, 106. Énfasis agregado). Vygotski formula esto como la famosa ley socio-genética, según la cual "cada función en el desarrollo cultural del niño aparece en el escenario dos veces, en dos planos, primero el social, luego el psicológico, primero entre las personas como una categoría intermental, luego dentro del niño como categoría intramental” (Vygotsky 1977c, 106). La clave del desarrollo psicológico reside en la interacción social. Incluso la relación del niño con los objetos físicos "pasa a través de otras personas" (Vygotsky 1978, 30). Vygotski reformula en el plano psicológico la sexta Tesis de Marx sobre Feuerbach de la esencia humana como "el conjunto de las relaciones sociales" (Marx 1984)12 al decir que "la naturaleza mental del hombre representa la totalidad de las relaciones sociales internalizadas y convertidas en funciones del individuo” (Vygotsky 1997c, 106).

12 Sobre análisis más detallados de la tesis de Marx sobre Feuerbach ver Labica (1998).

En sus diarios, D. B. Elkonin ve la mediación del signo como una categoría clave en el pensamiento de Vygotski. Para Elkonin, sin embargo, la mediación también es un problema. Habla sobre el enigma de la mediación simbólica. Hace una pregunta aparentemente simple: "¿Por qué un signo, en contraste con una herramienta, se dirige "internamente" y, lo más importante, ¿cómo organiza el comportamiento? Si lo miras en términos naturales, no hay nada en un signo que pueda hacer esto" (El’konin 2001, 10).

Elkonin da la siguiente respuesta. El "signo" es introducido por otra persona, inicia el comportamiento de una persona a través de otra persona. El signo es, por así decirlo, una introducción de otra persona en la organización del comportamiento de una persona. A este respecto, es posible entender un signo como una especie de regalo social. Un regalo sirve como recordatorio del donante. “Es por eso que un signo es social, y es por eso que organiza el comportamiento… El significado principal del signo es social, es decir, la organización del propio comportamiento a través de otro… El signo es eficaz porque es, por así decirlo, una marca de la presencia activa de otro en el comportamiento de uno" (El’konin 2001, 11).

Este comentario de Elkonin abre nuevas preguntas y direcciones para la investigación. El primero es la naturaleza dialógica de la mente. Si el otro está presente en el significado de un signo, entonces podemos entender la mente humana como actividad dialógica del signo, y al individuo como un "microcosmos social, como un tipo, como una expresión o medida de la sociedad" (Vygotsky 1997b, 317). Esto nos lleva más allá de la dicotomía individuo-sociedad a una concepción de la ‘societalidad’ del individuo. Otra consecuencia esencial del comentario de Elkonin es una comprensión semiótica de la zona de desarrollo próximo. Con la ZPD solo hay mediación si hay significados (Kozulin 1990b). En la última fase de la teoría de Vygotski, la construcción del significado, la mediación simbólica se convierte en una clave para las interacciones que tienen lugar en la ZPD.

Zinchenko también expresa la naturaleza dramática del desarrollo en la zona de desarrollo próximo. “En una primera aproximación, el proceso del desarrollo en la psicología histórico-cultural puede ser descrito como un drama que se desarrolla sobre el equilibrio entre las formas reales e ideales, su transformación y sus conversiones de una a otra. El actor, y a veces el dramaturgo, es el sujeto del desarrollo. El escenario es su vida en el mundo, o el mundo es su vida" (Zinchenko 2001, 34.)

Algunas conclusiones

Según Ratner, "una gran fortaleza del sistema psicológico de Vygotski es su consistencia lógica" (Ratner 1998, xiv). Sin embargo, si solo enfatizamos la coherencia lógica, podríamos perder la perspicacia del desarrollo de los conceptos de Vygotski. En vez de tratar de postular una supuesta coherencia en Vygotski, el objetivo de este artículo ha sido la dinámica del desarrollo de sus conceptos (véase también Yaroshevski y Gurgenidze 1997, 368).

Ahora podemos resumir los resultados de nuestro análisis del desarrollo de la psicología histórico-cultural de Vygotski y las concepciones semióticas del sistema de signos y habla (ver la tabla uno a continuación).

Los conceptos explicativos de Vygotski se mueven de una concepción "habla como reflejo" socio-conductista  a una idea histórica cultural de la actividad mediada. Este movimiento representa una ruptura con el viejo modelo explicativo "clásico" y a través de esta ruptura, Vygotski abre un camino hacia un nuevo enfoque científico de la psique de los seres humanos. Esto puede conceptualizarse como una transición de la psicología clásica a la no clásica, como lo hacen Asmolov y otros (Asmolov 1998; El’konin 2001), o como una ruptura con la ciencia "moderna". En términos althusserianos, podríamos decir que definitivamente hay una ruptura epistemológica entre estas dos fases en el pensamiento de Vygotski. Foucault, sin embargo, nos recuerda que la ruptura no ocurre en un solo punto. La fase socio-conductual puede entenderse como el comienzo, como el discurso positivo de la conciencia, que se transforma en la teoría genuina de la función psicológica superior a través de varios cambios y rupturas epistemológicas. La primera ruptura entre el socio-conductismo y la teoría histórico-cultural es obvia (Langford 2005; Veresov 1999). Lo que queda por explicar es el significado de la transición de la concepción instrumental del signo a la comprensión semiótica sobre la mediación del signo. ¿Hay otra ruptura, el movimiento final hacia la teoría madura de las funciones psicológicas superiores? En términos de Althusser: ¿la psicología histórico-cultural llega a su juventud solo en la concepción semiótica tardía de los signos de Vygotski?

Las diferentes respuestas a estas preguntas implican una comprensión diferente sobre el desarrollo reciente de la teoría histórico-cultural. Si ponemos énfasis en la primera ruptura solamente, es natural ver las dos últimas fases del pensamiento de Vygotski, por así decirlo, como dos caras de la misma moneda. Así es como se ha leído a Vygotski especialmente en la tradición CHAT (ver Engestrom y Miettinen 1999). Si ponemos énfasis en la segunda ruptura, hay dos modos epistemológicamente diferentes de investigación psicológica. Zinchenko aclara este punto: "Es hora de que nos demos cuenta de que hoy nos enfrentamos a dos paradigmas científicos: la psicología histórico-cultural y la teoría psicológica de la actividad" (Zinchenko 1995, 40. Énfasis añadido).

Tabla 1. Desarrollo de la teoría de Vygotski de los signos como mediadores semióticos

Si echamos un vistazo incluso más superficial al momento histórico después del prematuro fallecimiento de Vygotski, nos damos cuenta fácilmente de las diversas formas en que su trabajo ya se leía en ese momento. Los obituarios, escritos por Leóntiev y Luria en 1934 son más reveladores a este respecto. Luria enfatiza la naturaleza semiótica mediada por el habla de las funciones psicológicas superiores:

“Vygotski analizó el origen de funciones mentales tan complejas como la memoria lógica, la atención activa, la voluntad, el habla, el pensamiento; siendo uno de los primeros psicólogos en su país en introducir el método del "desarrollo" en el estudio experimental de estos problemas. Le llamó la atención el hecho de que el habla desempeña el papel más importante en el desarrollo del comportamiento complejo; es el habla el que crea nuevas funciones interconectadas a través de su significado" (Luria 1935, 238. Énfasis añadido).

Leóntiev avanza hacia el enfoque de la actividad, que se convertirá en su empeño durante las próximas décadas.

“La interpretación de la estructura mediada de los procesos psicológicos humanos y los fenómenos mentales en general como actividad humana fue para Vygotski la piedra angular, el fundamento de toda la teoría psicológica que desarrolló: el desarrollo de la teoría sociohistórica ('cultural' en lugar de 'natural') de la mente humana" (Leont'ev 1997, 43. Énfasis añadido).

En la metodología de Vygotski hay un fuerte énfasis en la naturaleza sistémica de la mediación. En su enfoque sistémico y relacional, la actividad está mediada por herramientas, signos, sistemas simbólicos y por otras personas. La clave de Vygotski es siempre relacionar estos mediadores entre sí, porque funcionan como un todo sistémico, como un "sistema psicológico" que "incluye la combinación compleja de actividad simbólica y práctica" (Vygotsky 1999b, 61). Desde el punto de vista metodológico, uno no puede separar los signos, las herramientas y la interacción social entre sí.

Esto se puede presentar modificando ligeramente la figura original de Vygotski de los modos de mediación.

Figura 3. Concepción sistémica de la mediación

Está claro que el propio interés de investigación de Vygotski estaba en la mediación semiótica y la actividad conjunta, pero siempre enfatizó el enfoque sistémico y la necesidad de relacionar las diferentes formas de mediación entre sí.

Desde este punto de vista, la tradición histórico-cultural puede verse como una red de teorías que tienen intereses de investigación diferentes con interpretaciones parcialmente compatibles y en parte competitivas de la naturaleza básica de la mediación (Hyden 1988). Es importante señalar que cada interés de investigación abre diferentes problemas.13 El concepto de actividad orientada a objetos, desarrollado después de Vygotski en la teoría de la actividad, ofrece un buen ejemplo. La orientación a objetos aporta a la teoría cultural-histórica un elemento que faltaba en los escritos de Vygotski, y abre nuevas direcciones para la investigación. Sin embargo, la interpretación del concepto del objeto puede ser diferente dentro del marco de análisis mediacional. Puede ser más instrumental o más semiótico. El debate entre estas interpretaciones es uno de los componentes básicos en el desarrollo de la teoría cultural-histórica misma.

13 Esta verdadera voz múltiple de la tradición histórico-cultural se reflejó muy bien ya en 1973 en las políticas educativas y educabilidad humana de Yrjo-Paavo y Jarkko (Hayrynen y Hautamaki 1973). Para las variaciones actuales en la discusión teórica, ver las contribuciones de Podolsky y Daniels en este volumen.

En mi lectura, hay una fase semiótica realmente distinta en el pensamiento de Vygotski. Sin embargo, su concepción de la mediación de los signos permanece, en muchos aspectos, abierta a diferentes interpretaciones. A este respecto, podemos ver a Vygotski como un fundador de la discursividad en el sentido que Foucault interpreta esta palabra: “Los fundadores de la discursividad son únicos en el sentido que no son solo los autores de sus propios trabajos. Han producido algo más: las posibilidades y las reglas para la formación de otros textos. Han establecido una posibilidad infinita de discurso” (Foucault 1991b, 11).

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