Reflexión sobre la relación entre la teoría histórico-cultural y la dialéctica
Manolis Dafermos
Psijologuícheskaia naúka i obrazovanie. 2015. 20 (3): 16–24
Психологическая наука и образование. 2015. Т. 20. № 3
Traducción: Efraín Aguilar
Introducción
Hay dos
significados distintos pero interconectados en el título del presente trabajo.
El primer significado se refiere a la necesidad de estudiar la influencia de la
dialéctica en la formación de la teoría histórico-cultural. El segundo significado
está relacionado con la necesidad de repensar la teoría histórico-cultural
desde una perspectiva dialéctica.
En primer lugar, me gustaría decir que debido a un conjunto de
razones sociales y cognitivas, la dialéctica ha desaparecido de la vista de la academia
del Atlántico Norte. Es una verdadera paradoja que, si bien las contradicciones
y los conflictos sociales se han fortalecido, los filósofos y los académicos
tienden a evitar la dialéctica como un modo de pensar que permite el estudio de
la dinámica de estos conflictos. Además, el encanto oculto del posmodernismo en
la academia occidental condujo al rechazo de la dialéctica como una de las
"grandes narrativas de la
modernidad" [11].
Aunque la explicación de la postura negativa en relación con el
modo dialéctico de pensamiento está fuera del alcance de este artículo, me
gustaría señalar que la creciente individualización y fragmentación de la vida
social en América del Norte y Europa Occidental no es irrelevante para la falta
de comprensión de la dialéctica a nivel de la vida cotidiana.
Una situación similar ocurre en la Rusia post-pieriestroika.
Sokolova [15, pág. 69] señala que "en Rusia después de la pieriestroika,
la "dialéctica" y la "lógica dialéctica" casi son tratadas
como palabras obscenas...". La
dialéctica ha sido rechazada por muchos académicos rusos como resultado de una
aceptación acrítica de las formas dominantes de pensar en la academia del
Atlántico Norte.
La dificultad de captar la esencia de la teoría histórico-cultural
en el contexto de su desarrollo está relacionada con la falta de un modo
dialéctico de pensamiento y la tendencia a que su recepción se vea a través de la
lente de las formas dominantes de pensamiento en la academia del Atlántico
Norte. Vale la pena señalar que "para introducir la teoría de Vygotski a
la psicología mundial, los vygotskianos occidentales simplificaron y adaptaron
la imagen completa a la tradición existente" [19, p. 290]. La devaluación
de los fundamentos dialécticos de la teoría histórico-cultural conduce
inevitablemente a la simplificación excesiva y la incomprensión. "De
hecho, la versión dominante de la teoría de Vygotski en la psicología
norteamericana y europea occidental, con pocas excepciones... es una psicología
en crisis porque se le vacía de su dialéctica y se ignora la conciencia"
[8, p. 92-93].
Hacia un abordaje dialéctico de la teoría cultural-histórica
El método
dialéctico se centra en el examen de las cosas en sus conexiones mutuas,
movimiento y desarrollo. La dialéctica como una forma de pensar capta y
representa el proceso del desarrollo de un objeto concreto en sus
interconexiones con otros objetos [13]. En contraste con el reduccionismo
generalizado que se centra en el análisis de los elementos aislados de la
realidad, un enfoque dialéctico está orientado a comprender la completa
complejidad de las interrelaciones de la realidad y las contradicciones que las
encarnan [2].
Una comprensión dialéctica de la teoría histórica cultural puede ser
desarrollada sobre la base de la investigación de tres aspectos distintos pero
entrelazados: en primer lugar, el contexto histórico de la formación de la
teoría histórica cultural en la Unión Soviética de la década de 1920 y
principios de la década de 1930, esto es, la dialéctica de la historia que
estimuló la formación de enfoques teóricos innovadores. En segundo lugar, la
crisis de la psicología como disciplina a principios del siglo XX y la
dialéctica del desarrollo de la ciencia que condujo a un cambio radical en el
enfoque del estudio de los procesos psicológicos. En tercer lugar, la
dialéctica del desarrollo creativo de Vygotski como personalidad involucrada en
el proceso de reconstrucción radical del conocimiento psicológico y la
construcción de una nueva teoría en el dominio de la psicología.
La dialéctica de la historia, la dialéctica del desarrollo de la
ciencia y la dialéctica del desarrollo de la personalidad solo pueden
entenderse adecuadamente en su conexión interna. La necesidad de una
transformación radical de la ciencia no fue un proyecto cognitivo
exclusivamente interno, sino que surgió como resultado de un conflicto entre
las teorías psicológicas existentes y las tareas que surgen de la práctica
social en el contexto social concreto. Las teorías naturalistas e
individualistas no podían abordar los desafíos sociales de la Rusia soviética
posrevolucionaria (eliminación del analfabetismo, promoción de la solidaridad
social, fundamento de la educación social, etc.). Vygotski, el fundador de la
teoría histórica cultural, participó activamente en la práctica de construir
una nueva sociedad, así como en el proceso de reflexión crítica de la
psicología como disciplina desde la perspectiva de las tareas sociales y
científicas que surgen del contexto histórico y cognitivo concreto. Así, el
libro de Vygotski "Significado histórico de la crisis en psicología" fue una reflexión crítica de
la psicología desde la perspectiva de la práctica social radical. Siguiendo las
tradiciones filosóficas de Spinoza, Hegel y Marx, Vygotski buscó fundar una
epistemología monista, dialéctica y materialista de la práctica. Utilizó como
epígrafe de su libro las palabras de la Biblia (Salmo 118: 22, 23): “la piedra
que los constructores rechazan se convierte en la piedra angular” [27, p. 233].
Para Vygotski, tanto la práctica social como la filosofía dialéctica fueron las
piedras que los constructores ignoraron.
La dialéctica hegeliana fue llamada por el pensador ruso Herzen
como "álgebra de la revolución". Hegel ofreció un análisis brillante
de los grandes cambios sociales y su influencia en el desarrollo del
pensamiento humano: “... no es difícil ver que el nuestro es un tiempo de
nacimiento y un período de transición a una nueva era. El espíritu ha roto con
el mundo que hasta ahora había habitado e imaginado, y está decidido a
sumergirlo en el pasado y en el trabajo de su propia transformación” [9, pp. 6-7].
Vygotski vivió en una época de transformación social radical y su teoría
histórico-cultural puede considerarse una respuesta a los desafíos de su tiempo
y un intento de participar activamente en el proceso de cambio social. Desde
esa perspectiva, el interés de Vygotski en la dialéctica estaba relacionado con
su intento de conceptualizar y promover un cambio social radical. “Nuestra
ciencia no pudo y no puede desarrollarse en la vieja sociedad. No podemos
dominar la verdad sobre la personalidad y la personalidad misma mientras la
humanidad no haya dominado la verdad sobre la sociedad y la sociedad misma. Por
el contrario, en la nueva sociedad, nuestra ciencia ocupará un lugar central en
la vida. ‘El salto del reino de la necesidad al reino de la libertad’
inevitablemente pone en el orden del día la cuestión del dominio de nuestro
propio ser, de su sujeción al yo” [27, p. 342].
La necesidad de estudiar la dialéctica seriamente se derivó de la
crisis de la psicología como disciplina a principios del siglo XX y la
necesidad de desarrollar una alternativa para superarla. Se ha desarrollado
varias formulaciones de la crisis en psicología en ese contexto histórico y
científico (Bühler, Politzer, Driesch, Koffka, Husserl, etc.).
A inicios de la psicología soviética en la década de 1920
surgieron los primeros intentos de superar la crisis en psicología sobre la
base de un marco dialéctico. Por ejemplo, Kornílov [10] intentó considerar la
psicología a la luz del materialismo dialéctico. Vygotski ofreció una perspectiva
totalmente diferente de la aplicación del método dialéctico en psicología en su
manuscrito "El significado histórico de la crisis en psicología" [27;
28].
La comprensión de Vygotski de la dialéctica se formó bajo la
influencia del trabajo de Engels "Dialéctica de la naturaleza" que se
publicó en la URSS en 1925 y también del debate entre "dialécticos" (o
"dieborinistas") y "mecanicistas" sobre las posibilidades
de la aplicación de la dialéctica en las ciencias concretas.
Vygotski argumenta que “La dialéctica cubre la naturaleza, el
pensamiento, la historia: es la ciencia más general y máximamente universal. La
teoría del materialismo psicológico o dialéctica de la psicología es lo que
llamé psicología general” [27, p. 330]. Sin embargo, Vygotski criticó los
intentos de una aplicación directa de la dialéctica en psicología que se
hicieron en su tiempo: “... están buscando, en primer lugar, en el lugar
equivocado; en segundo lugar, el objeto equivocado; tercero, de manera equivocada”
[27, p. 313].
Davuídov y Radzijovski argumentaron que a pesar de la intención de
aplicar la dialéctica en psicología, "... la lógica formal prevaleció
tanto antes como después del tiempo de Vygotski" [5, p. 61]. La
reconstrucción de la lógica dialéctica de "El Capital" de K. Marx
tuvo lugar en 1960 (Rosental, Iliénkov, Vaziulin, etc.). Vygotski planteó el
problema de la aplicación de la dialéctica en psicología a principios de la
década de 1920, pero no se resolvió.
El hecho de no resolver el problema de la aplicación de la
dialéctica en psicología revela tanto su complejidad como el carácter profundo
de la crisis en psicología. El concepto de crisis en psicología fue
desarrollado por Vygotski sobre la base de una explicación dialéctica del
desarrollo de la ciencia: "La ciencia comenzó a ser entendida
dialécticamente en su movimiento, es decir, desde la perspectiva de su
dinámica, crecimiento, desarrollo, evolución. Es desde este punto de vista que
debemos evaluar e interpretar cada etapa del desarrollo” [27, p. 292].
Vale la pena señalar también que la reflexión de Vygotski sobre la
crisis en psicología desde una perspectiva dialéctica precedió a la aparición
de la teoría histórica cultural. La elaboración de la teoría histórico-cultural
era imposible sin un análisis epistemológico y metodológico del estado de la
crisis en la psicología como disciplina.
Las raíces de la crisis en psicología residen en el fracaso del
dualismo cartesiano para ofrecer un tratamiento adecuado de las cuestiones
ontológicas, epistemológicas y metodológicas centrales que surgieron de la
investigación psicológica contemporánea. Tanto el monismo spinoziano como la
dialéctica hegeliana le ofrecen a Vygotski una visión creativa para elaborar un
marco teórico para superar el dualismo en psicología.
Por lo general, la teoría de Vygotski es considerada como una suma
de ideas prefabricadas ya preparadas que se pueden aplicar directamente en
diferentes dominios. Una recepción instrumental de la teoría histórica cultural
como un sistema finalizado de ideas confeccionadas entra en conflicto con el
desarrollo creativo de Vygotski. El proceso de formación y transformación de la
teoría de Vygotski durante su vida puede entenderse adecuadamente desde una
perspectiva dialéctica.
Durante su corta vida, Vygotski revisó y transformó continuamente
su propia teoría. El proceso mismo del desarrollo del programa científico de
Vygotski en términos de Lakatos puede considerarse como la parte más importante
de su legado. En otras palabras, el viaje creativo y dramático de Vygotski es
más importante que sus conclusiones concretas. "Lo que más perdura en su
legado no son los resultados de sus investigaciones empíricas, sino el retrato
que pinta de la mente y su desarrollo, junto con sus reflexiones sobre la
naturaleza de la explicación psicológica" [1, p. 51]. La teoría de Vygotski
puede entenderse dialécticamente como un proceso de desarrollo con tensiones dramáticas
y conflictos, discontinuidades y cambios radicales.
En contraste con el discurso dominante que representa la teoría
vygotskiana como un corpus de conocimiento homogéneo que podría aplicarse
directamente a la investigación empírica, sostengo que se puede hallar
discontinuidades y puntos de inflexión en el desarrollo de la teoría de
Vygotski durante su corta vida. "... un cambio de ascenso (o épocas de
desarrollo) es posible en la vida humana como en un drama o una tragedia, y
cada uno de ellos dura varios años" [32, p. 8].
Vygotski cambió radicalmente su perspectiva filosófica y
científica por lo menos tres veces. La transición del subjetivismo y el
idealismo al objetivismo y el materialismo bajo la influencia de la Revolución
de Octubre (1919–1920) fue el primer punto de inflexión de su vida. Vygotski venía
del campo de las humanidades a la psicología como un extraño. Aceptó la
reflexología y el conductismo, que eran las formas generalizadas de pensamiento
científico normales en la década de 1920 en la URSS, pero nunca se identificó
por completo con ellas.1 El segundo punto de inflexión estaba
relacionado con la transición de Vygotski de la reflexología y el conductismo a
la teoría histórica cultural (1927). A diferencia de los relatos naturalistas
dominantes en psicología, Vygotski se centró en la investigación del desarrollo cultural de las funciones
mentales superiores [20]. La aparición primaria de la teoría histórica
cultural se hizo posible debido a la persistencia de Vygotski en aplicar el
enfoque dialéctico al campo de la psicología. Esta tendencia fue especialmente fuerte
en el trabajo de Vygotski "El significado histórico de la crisis en
psicología".
1 Viériesov
(1999) realizó una investigación profunda de este período del desarrollo
creativo de Vygotski.
El tercer
punto de inflexión ocurre como resultado de la insatisfacción de Vygotski con
su propia teoría y el intento de reformularla de una nueva manera (1932). Al
criticar su propio intelectualismo previo, Vygotski elaboró un conjunto de
conceptos tales como los sistemas psicológicos, el significado, la unidad de
los procesos afectivos e intelectuales, "pieriezhivanie", etc., para
desarrollar una teoría integradora, monista y dialéctica de la conciencia y la
subjetividad humanas.
En el desarrollo ontogenético de Vygotski se reprodujeron dos
enfoques principales para la construcción del conocimiento psicológico
(objetivismo, subjetivismo). No fue una simple repetición o recapitulación,
sino una reflexión crítica sobre las posibilidades y limitaciones de estos
enfoques desde la perspectiva de las tareas sociales y científicas que surgen del
contexto concreto a través de la lente del desarrollo personal de Vygotski.
Ninguno de los enfoques anteriores podría abordar los desafíos sociales de la
Rusia soviética posrevolucionaria. Al criticar tanto el objetivismo como el
subjetivismo en su manuscrito inacabado "El significado histórico de la
crisis psicológica", Vygotski no solo reveló las limitaciones del discurso
psicológico dominante, sino que también desaprobó sus puntos de vista
anteriores [22].
La teoría cultural histórica no era un esfuerzo individual puro,
sino más bien un proyecto colaborativo. La escuela histórico-cultural se ha
definido como un "proyecto de investigación colaborativo,
multigeneracional, cargado de valores e ideológicamente impulsado que se
extendió mucho más allá de los límites de la ciencia en su aspecto mentalista
tradicional" [16, p. 96]. El desarrollo personal de Vygotski estuvo
conectado internamente con el proceso más amplio de cambio social en la Unión
Soviética de la década de 1920 y principios de la década de 1930, así como con
el desarrollo de su propia escuela científica.
Teoría histórico-cultural y el concepto dialéctico del desarrollo
La teoría
histórico-cultural surgió como una teoría del desarrollo de las funciones
mentales superiores. En contraste con la "psicología superficial"
(conductismo) y la "psicología profunda" (psicoanálisis), Vygotski
intentó crear una "psicología de altura" [31, p. 351; 14, p. v]
enfocándose en las posibilidades de los humanos de convertirse conscientemente
en creadores de sí mismos y del mundo. En contraste con las teorías
psicológicas que enfatizan el nivel real del funcionamiento humano, Vygotski
elaboró una teoría del desarrollo humano orientada hacia el futuro.
Al tener en cuenta las percepciones hegelianas y marxistas de la
dialéctica, Vygotski formuló el concepto del desarrollo como el concepto
central de la teoría histórica cultural.
“Necesitamos concentrarnos no en el producto del desarrollo sino en el proceso mismo por el cual se establecen formas superiores... Abarcar
en la investigación el proceso del desarrollo de una cosa determinada en todas
sus fases y cambios, desde el nacimiento hasta la muerte, significa
fundamentalmente descubrir su naturaleza, su esencia, porque ‘solo en movimiento es que un cuerpo muestra
lo que es’. Por lo tanto, el estudio histórico [es decir, en el sentido más
amplio de la ‘historia’] del comportamiento no es un aspecto auxiliar del
estudio teórico, sino que forma su base" [26, pp. 64-65].
La dialéctica puede ser considerada como un tipo de pensamiento
que examina una cosa en su interconexión con otras cosas y en el proceso de su
cambio y desarrollo. Para Vygotski, el desarrollo no es una acumulación gradual
de cambios cuantitativos o un simple crecimiento natural, sino una
transformación cualitativa que tiene lugar como resultado de conflictos
internos y crisis e intentos de sujetos concretos para resolverlos. "La
teoría histórico-cultural permite estudiar no solo las etapas del desarrollo,
sino también investigar el desarrollo como
un proceso de transición de una etapa a otra a través de cambios y
reorganizaciones cualitativas revolucionarias" [21, p. 219].
El desarrollo humano fue examinado por Vygotski como una unidad
contradictoria de progresión y regresión, integración y desintegración, en
lugar de una progresión lineal o una acumulación de cambios cuantitativos.
"De hecho, uno de los principales logros de Vygotski fue que sustituyó las
opiniones fijas y preformistas sobre el desarrollo, la noción de que el
desarrollo existe en un flujo y cambio constante, con procesos dinámicos
abiertos y en constante cambio que unen a los organismos y sus entornos"
[17, p. 478].
En contraste con el examen reduccionista de las funciones mentales
separadas, Vygotski introdujo el concepto de sistemas psicológicos sobre la
base de una descripción sintética del funcionamiento humano. Vygotski presentó
los sistemas psicológicos como formaciones históricamente cambiantes en
desarrollo, que incluyen funciones mentales interconectadas dinámicamente, en
lugar de Gestalts estáticas.
Vygotski se centró principalmente en la investigación del
desarrollo progresivo de las funciones mentales superiores. Sin embargo, en los
últimos años de su vida, Vygotski demostró interés en el estudio de la
regresión, en términos de regresar a un nivel previo de desarrollo como
resultado del colapso de las funciones mentales de la organización sistémica.
"... si la idea de Vygotski de síntesis dialéctica del
desarrollo se sigue con rigor, ningún organismo puede regresar a una etapa/estado
de desarrollo anterior. En cambio, el organismo puede transformarse de un
estado o etapa superior a uno inferior, pero eso no constituiría un retroceso
de un camino previamente atravesado en el desarrollo” [18, p. 176].
En contraste con las concepciones evolucionistas y mecanicistas,
una comprensión dialéctica del desarrollo podría conceptualizarse en términos
de colisiones, conflictos y crisis. Especialmente el concepto de crisis es
crucial en el estudio de la teoría de Vygotski [4]. Él utilizó el concepto de
crisis para la conceptualización no solo del proceso de desarrollo del
conocimiento psicológico, sino también para la investigación del desarrollo
humano. La crisis no se reduce a transiciones de una edad a otra (crisis de1 primer
año, crisis de los 3, crisis de los 7 años, etc.) en la literatura. Vygotski
creía que "las crisis no son una condición temporal, sino la forma de vida
interior" [30, p. 25]. Para Vygotski, el concepto de crisis era más que un
término científico. Era una forma de conceptualizar su propia experiencia de
vida. Vygotski experimentó el pogrom judío en su infancia, la muerte de su
madre y su hermano por tuberculosis, crisis médicas como resultado de su propia
enfermedad, la crisis de su propia escuela científica, fuertes e injustas
críticas a su teoría, etcétera.
El concepto de crisis como resultado de conflictos internos fue
desarrollado por Vygotski sobre la base de un modo dialéctico de pensamiento
que se opone a las formas de pensamiento individualistas. Al rechazar las
formas de pensamiento individualistas, Vygotski elaboró el concepto de situación
social del desarrollo que se reenfoca en relaciones únicas y dinámicas entre el
niño y la realidad social que le rodea. La situación social del desarrollo
"... determina total y completamente las formas y el camino a lo largo del
cual el niño adquirirá características de personalidad cada vez más nuevas,
extrayéndolas de la realidad social así como de la fuente básica de desarrollo,
el camino a lo largo del cual lo social se convierte en lo individual” [28, p.
198]. Desde un punto de vista dialéctico, el desarrollo humano solo es posible
sobre la base de interrelaciones dinámicas y dramáticas entre sujetos concretos
y la sociedad que no podrían reducirse a sus interacciones externas. Las
interrelaciones dinámicas y dramáticas entre sujetos concretos y la sociedad no
se reducen a una adaptación de los sujetos al entorno social como se ha
aceptado en la psicología convencional del Atlántico Norte.
“El primer factor de este tipo es siempre, como lo ha establecido
el análisis psicológico, la necesidad humana de adaptarse al medio ambiente. Si
la vida que lo rodea no presenta desafíos para un individuo, si sus reacciones
habituales e inherentes están en completo equilibrio con el mundo que lo rodea,
entonces no habrá base para que ejerza la creatividad. Una criatura que esté
perfectamente adaptada a su entorno, no querría nada, no tendría nada por lo
que luchar y, por supuesto, no podría crear nada” [24, p. 28-29].
Al desafiar el concepto de adaptación, Vygotski propuso la idea de
una actividad creativa orientada hacia el futuro, que "... convierte al
ser humano en una criatura orientada hacia el futuro, creando el futuro y
alterando así su propio presente" [24, p. 9]. El concepto de adaptación
está orientado a las formas presentes y actuales del ser humano, mientras que la comprensión dialéctica del desarrollo
enfatiza las potencialidades humanas, al crear el futuro y transformar las
formas actuales del ser humano.
El desarrollo del rango de potencialidades humanas a través de la
co-creación de significados dentro de la práctica social puede considerarse
como una dimensión esencial de la teoría histórica cultural. A diferencia
de los relatos funcionalistas de los estados mentales, la teoría histórica
cultural se ha orientado a la promoción de los "brotes" o
"flores" en lugar de los "frutos" del desarrollo en los
términos de Vygotski [29, p.42]. Él se centró principalmente en cambiar el devenir,
más que en el ser aislado y estático.
Conclusión
Como
conclusión, una comprensión dialéctica de la teoría histórica cultural se basa
en su examen como un proyecto inacabado colaborativo en desarrollo que surgió
en un período dramático y creativo de cambio social radical.
Inspirado por los relatos hegelianos y marxistas de la dialéctica,
Vygotski desarrolló una teoría histórica cultural que abre nuevas perspectivas
para repensar y superar la crisis en psicología. A diferencia de las teorías
psicológicas dominantes que describen el nivel de desarrollo real y presentan
formas de ser humano, la teoría histórica cultural ilumina el desarrollo humano
prospectivo. El devenir humano puede describirse desde una perspectiva
histórica cultural en términos de un drama. “Un drama verdaderamente lleno de
lucha interna es imposible en los sistemas orgánicos: la dinámica de la
personalidad es drama... Un drama no puede ser de otra manera, es decir, es un
choque de sistemas. La psicología es "humanizada" [23, p.
67].
A pesar de las contribuciones esenciales de Vygotski a la
formación de una comprensión dialéctica de los problemas teóricos y
metodológicos básicos de la psicología como disciplina, la aplicación de la
dialéctica en psicología sigue siendo una pregunta abierta sin resolver. Noventa
años después, la declaración de Vygotski de que "... la psicología hoy en
día es una psicología anterior a Das
Kapital" [27, p. 342] sigue siendo válida.
Aunque Vygotski se inspiró en las ideas dialécticas de Hegel,
Marx, Engels, etc., "... no logró sistematizarlas en un marco teórico
integrador unificado. La principal dificultad radica en la desesperada
ambigüedad de integrar los conceptos filosóficos marxistas en conceptos
psicológicos..." [8, p. 278]. Incluso hoy en día aún quedan cuestiones
metodológicas y teóricas serias sin resolver, tales como si es posible aplicar
el método de ascendencia de lo abstracto a lo concreto para la construcción de
un sistema de conceptos psicológicos. También sigue siendo ambiguo cuál es la
relación entre un método de investigación lógico y uno histórico para el
estudio de los procesos psicológicos.
Quizás la dimensión más desafiante de este problema es que la
aplicación de la dialéctica a disciplinas concretas requiere el desarrollo
sustancial de la dialéctica misma. El cambio de dialéctica en el proceso de su
aplicación a disciplinas concretas constituye una gran incógnita en espera de
ser explorada. Se requiere un mayor desarrollo de la dialéctica para la
conceptualización de las crecientes contradicciones sociales y la promoción del
cambio social.
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31. Zinchenko V.P. Foreword. Journal of Russian and East European Psychology, 1999. Vol. 37 (2), pp. 3–12.
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345–370
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