Este blog busca difundir algunas fuentes de la obra vygotskiana publicada en español, así como traducir algunos artículos editados en revistas y libros o bajados de la red; todo relacionado con Vygotski.

lunes, 25 de abril de 2016

Jolmogórova


Papel de las ideas de L.S. Vygotskiy en el desarrollo del paradigma de la cognición social en la psicología moderna: revisión de la investigación extranjera y discusión de las perspectivas
А.B. Jolmogórova
Universidad Estatal de Psicología y Educación de Moscú
Psicología histórico-cultural 2015. Vol. 11. № 3. pp 25—43.

Traducción: Efraín Aguilar

Para los humanos la comprensión de los estados mentales
es lo mismo que la ecolocalización para los murciélagos.
Dan Sperber
(Conferencia sobre darwinismo y ciencias humanas, junio de 1993)

Nueva crisis metodológica en psicología y psiquiatría: ¿cuál es la salida?

Los problemas y dificultades en la investigación de la cognición social están determinados en gran medida por la crisis metodológica general en psicología y psiquiatría. La ciencia del siglo XXI, armada con nuevos medios técnicos para investigar el cerebro, no podía soportar la tentación de la esperanza en descubrir los secretos de la psique en su biológico sustrato. El reduccionismo biológico en realidad envolvió a la psicología y la psiquiatría modernas, convirtiéndose en base metodológica de las neurociencias en rápido desarrollo, listas para absorber grandes inversiones y, junto con ellas, todas las investigaciones de orientación diferente.

El estudio de la información actual sobre el proyecto a gran escala del Instituto Nacional de Salud Mental (NIMH) de los EUA, dirigido a buscar razones para la nueva clasificación de los trastornos mentales y darse a conocer bajo la abreviatura RDoC (Research Domain Criteria —Criterios de dominios de investigación) indica que el objetivo central del proyecto financiado generosamente, es hallar correlatos biológicos en una variedad de redes neuronales para los procesos mentales más complejos, como la reflexión, la mentalización, la metacognición (http://www.nimh.nih.gov/research_priorities/rdoc/development_and_definitions_of_
the_rdoc_do_mains_and_constructs.shtml).

En el proyecto RDoC se presume que las propiedades integrales de la mente definen el estado de las redes neuronales. Sin embargo, hay una gran cantidad de datos a favor de otras bases de la psique humana, que se establecen bajo el paradigma histórico-cultural. De acuerdo con la teoría histórico-cultural del origen de la psique, de L.S. Vygotskiy, las funciones mentales naturales son  comunes a los animales y al hombre, pero las superiores solo son inherentes a los humanos y se forman en la ontogénesis durante el desarrollo de la experiencia cultural del niño. En la base de las funciones mentales superiores, incluidas el pensamiento, la memoria, la atención, los procesos emocionales y volitivos, está el sistema de los medios de su regulación, los que no han sido dados al hombre por la naturaleza, sino que son parte de la cultura y son objeto de dominio durante la ontogenia. Este proceso de dominación puede ser interrumpido por razones de carácter biológico y como resultado de factores ambientales adversos, pero es fundamentalmente diferente del proceso del desarrollo de la psique del mundo animal, al cual por analogía recurrieron todo el tiempo los defensores modernos de la introducción activa del modelo biomédico en la investigación científica.

Para ser justos, se debe decir que la crítica de tal orientación de la ciencia moderna también tiene carácter a gran escala. Una de las últimas discusiones se desplegó en las páginas de la revista de la Asociación Mundial de Psiquiatría en 2014, respecto a la publicación de un artículo del experto del NIMH Bruce Cuthbert, al revelar la orientación y las bases del proyecto RDoC. En particular se observa que: «Los estudios comparativos han debilitado indirectamente el punto de vista de la exclusividad de la especie humana, que consistía en el aislamiento de la mente y el cerebro, y demostraron asimismo datos sobre la conservación de los genes, neurotransmisores y funciones del comportamiento durante la evolución, que están no solo en roedores y primates, sino en animales de laboratorio como la Drosophila y el pez cebra» [49, p. 31].

El parecido con el pez cebra y con las moscas de la fruta no se asocia con algo negativo u ofensivo para el ser humano pero, ¿es útil este enfoque para comprender los detalles de la psicología y la psicopatología humanas? Las dudas sobre el tema fueron expresadas por muchos expertos conocidos, participantes de la discusión y cuyos comentarios se resumen a continuación [28].

Así, el experto estadunidense Jerome Wakefield hace hincapié en el problema real de la consciencia humana en el proyecto analizado: «Se le da poca atención al papel central del significado y de la experiencia subjetiva de la consciencia. Incluso si la investigación muestra que la singularidad humana es un error, el sistema de los significados sigue siendo un concepto complejo y único. Sin embargo, en los RDoC se minimiza la importancia del significado de la experiencia subjetiva y de la representación mental. Por su puesto en los RDoC no está presente el dominio cognitivo, sin embargo, como el mayor énfasis está en los circuitos neuronales, esto más bien es una pantalla» [81]. El autor señala también la imposibilidad de establecer una relación directa entre el trabajo de los circuitos neuronales y el sistema de significados, cuyo papel en la salud mental ha recibido evidencia sustancial.

Otro conocido psiquiatra estadunidense, Мichael Phillips expresa sus dudas en el título de su artículo de que la psiquiatría estadunidense mantenga su liderazgo en el futuro, con esa estrategia de investigación dictada por el proyecto RDoC: «A pesar de que la iniciativa  RDoC es intelectualmente atractiva para los neurólogos, ésta no coincide con la trayectoria global actual de la psiquiatría … la iniciativa RDoC es un intento de desarrollar un sistema diagnóstico con la mínima participación de los especialistas, no es neurociencia. Se espera que la realidad económica, los factores sociales y las preferencias culturales aguarden  mientras los neurocientíficos no encuentren la verdad, y luego que todos los demás se adapten a esta verdad» [67].

Аllen Frances, director del proyecto para llevar a cabo el DSM IV y uno de los especialistas más destacados en el área de la clasificación de los trastornos mentales, está de acuerdo con la continuación de las investigaciones neurobiológicas y la necesidad de proyectos como los RDoC, pero indica la indebida exageración de su importancia como fuente de cambios revolucionarios en el enfoque de la patología mental. Subraya que no es la primera década costosa de investigación a profundidad de las bases biológicas de la patología mental, que hasta hoy ha dado muy poco para entender la naturaleza y menos aún para la práctica del tratamiento de diversos trastornos: «El NIMH tuvo una posición líder para entusiasmar a todo el mundo relacionado con las neurociencias, al llamar a los años 1990s la década del cerebro, y ejerció un esfuerzo considerable para introducir programas previamente equilibrados con la investigación biológica, las ciencias básicas, las terapias  y el sistema de salud en general. En esencia, el NIMH se convirtió en el instituto del cerebro. Como resultado de sus esfuerzos se llevó a cabo una excelente investigación, sin embargo de esto no resultó ninguna ayuda práctica para los pacientes…» [59].

Después de una descripción general de la crisis en las ciencias de la salud mental, regresemos al tema principal del artículo. Éste se enfoca en el paradigma de la cognición  social, el cual se rompió en la ciencia psicológica moderna en la cresta del paradigma cognitivo y coincidió con el florecimiento exitoso de las técnicas de neuroimagen. Como era de esperar, el nuevo paradigma dio lugar a una avalancha de investigaciones destinadas  a encontrar el llamado cerebro social [45; 46]. A la exposición y crítica del modelo del cerebro social se ha dedicado un artículo en dos partes, publicado en la revista  «Psicología histórico-cultural» [21; 22], por lo que no es necesario insistir en este modelo aquí.

Sin embargo, en el artículo mencionado las dos autoras solo indican brevemente una  hipótesis alternativa del cerebro social: se sugiere la idea del valor heurístico de la  concepción histórico-cultural del desarrollo de la mente de L.S. Vygotskiy para el desarrollo ulterior del problema de la cognición social.1 Мiеntras tanto, crece la cantidad de trabajos de investigadores occidentales de la cognición social que citan activamente a L.S. Vygotskiy y hacen hincapié en el papel fundamental de sus ideas para superar la crisis del paradigma de la cognición social, centrada en la metodología de las ciencias biológicas. Estos trabajos han aparecido en las últimas décadas en el contexto del estancamiento metodológico y del empirismo total de la mayoría de los estudios actuales de la cognición social. Así, a más de ochenta años de sus trabajos dedicados al sentido de la crisis en psicología de la primera mitad del siglo pasado [6], L.S. Vygotskiy de nuevo está en la vanguardia de las discusiones científicas y sus ideas dan la esperanza para salir de otra crisis de nuestra ciencia, relacionada con nuevos intentos de reducir lo mental a lo biológico y neutralizar las diferencias cualitativas entre animales y seres humanos.

1 Esta idea fue desarrollada por nosotras en una serie de artículos dedicados a las alteraciones de la cognición social en patología mental, con especial énfasis en el papel de la motivación social y la reflexión (Jolmogórova, 2014 b; Jolmogórova, Мinákova, 2014; Rychkova, Jolmogórova, 2013).

А.R. Luria estaba seguro que las ideas de L.S. Vygotskiy eran muy adelantadas para la psicología de su tiempo. Al analizar las fuentes de la crisis en la psicología de inicios del siglo ХХ, Vygotskiy vio la brecha entre la psicología descriptiva y la explicativa, que refleja la brecha metodológica en las posibilidades para estudiar los procesos mentales complejos y elementales: «La brecha entre las explicaciones fisiológicas de los actos elementales y las descripciones materialistas de los procesos mentales complejos continuará hasta que seamos capaces de entender de qué modo los procesos naturales como, por ejemplo, la maduración física y los mecanismos sensoriales, interactúan con los procesos que determinan la cultura; es esta interacción la que crea la actividad mental de un adulto. Tenemos que ir más allá del cuerpo, para detectar fuentes de las formas específicamente humanas de actividad mental» [19].

 Vygotskiy prestó mucha atención al problema de las bases cerebrales de las funciones mentales superiores. En los últimos años de su corta vida estudio medicina, a él pertenecen las ideas clave a partir de las cuales Luria sentó las bases de la neuropsicología. Con esto Vygotskiy, y después de él Luria, señalaron que las bases para los procesos mentales superiores de los sistemas funcionales del cerebro se forman en vivo, y un papel muy importante para su formación ha sido jugado por el lenguaje y otras herramientas de la civilización [8; 19].

Estos sistemas no están localizados en ciertas regiones del cerebro y están provistos de un sistema complejo de relaciones entre las diferentes unidades. Es característico que en el proceso del desarrollo de hipótesis del cerebro social se abren más y más nuevas secciones y relaciones incluidas en procesos tan complejos como la cognición social, que refuta la hipótesis del cerebro social como poseedor de una clara localización neuroanatómica [21; 22].

Vygotskiy planteó el problema de la especificidad de la mente humana, al tener en cuenta sobre todo, los orígenes culturales y la estructura especial de la herramienta [8]. Repitamos una de las declaraciones con mayor frecuencia citada, que caracteriza la idea general de  Vygotskiy: «Para entender los procesos mentales internos, es preciso ir más allá del organismo y buscar la explicación en las relaciones sociales de este organismo con el medio ambiente … aquellos que esperan hallar la fuente de los procesos mentales superiores dentro del individuo, cometen el mismo error del mono, al tratar de hallar su reflejo en el espejo detrás del mismo. No dentro del cerebro o del espíritu, sino en los signos, en el lenguaje, en las herramientas, en las relaciones sociales se halla la respuesta al misterio de los psicólogos intrigantes» [18].

La necesidad de avanzar en el estudio de la cognición social, del paradigma intrapsicológico (que se basa en una idea de la cognición social como resultado de la maduración de cierto sustrato cerebral programada genéticamente) al  interpsicológico nos  fijamos en la monografía básica publicada en 2008, cuyos editores son destacados expertos en los problemas de la cognición social [72; 73]. Sin embargo, las referencias a la obra de Vygotskiy sugeridas en ese contexto no se sostienen. Pero la solicitud de una nueva metodología уa está claramente formulada. Y esta vez ya no es una pequeña cantidad de investigadores occidentales de la cognición social quienes, en busca orientación metodológica descubrieron a Vygotskiy. Los investigadores rusos hicieron el análisis fundamental de las investigaciones extranjeras de la cognición social [24], pero el propósito de esta revisión es el trabajo de aquellos autores extranjeros que trabajan conscientemente en la tradición histórico-cultural.

En el periodo 2008—2009 hay dos trabajos básicos dirigidos al problema de la cognición social, un libro del psicólogo estadunidense y director del Instituto de antropología evolutiva Маx Planck, Мichael Тоmasello, «Orígenes de la comunicación humana» (traducido al ruso en 2011) y el tratado metodológico del psicólogo británico Charles Ferneyhough de la Universidad de Durkham, «Sobre la teoría de lo mental desde el punto de vista de Vygotskiy: la mediación, el diálogo y la formación de la comprensión social» [54]. Primero hay que decir que ambos autores son reacios al término cognición social, lo cual es natural a los seguidores de la teoría histórico-cultural del desarrollo mental. La singularidad de este término es que el criterio para la asignación de una clase especial de procesos mentales de la comprensión social o la cognición social es la naturaleza social de los objetos a los que se dirige este conocimiento; en otras palabras, estamos hablando de la percepción de otras personas y de diferentes situaciones sociales de las personas. Мiеntras tanto, de acuerdo con Vygotskiy, todo el conocimiento humano, toda su cognición tiene naturaleza social, por lo que es difícil no estar de acuerdo con los autores que es mejor usar términos que describan con mayor precisión el paradigma estudiado del proceso de la cognición social. Тоmasello escribe sobre el origen de los mecanismos de los procesos específicamente humanos de la comunicación en el curso de la evolución, usando los términos cognición social o procesos sociocognitivos, y Ferneyhough usa el término  comprensión social, que considera más preciso para describir los procesos implicados en la interpretación (lectura) de los estados mentales.

A la luz de los objetivos de este artículo es muy importante considerar las declaraciones de  ambos autores, que las ideas de Vygotskiy les permitió de modo radical una nueva mirada a los aspectos específicos de la comunicación humana y a la comprensión de unas personas con otras, es decir a posiciones fundamentalmente diferentes de abordar la discusión de los problemas psicológicos actuales, cristalizados en términos como mentalización, teoría de la  mente (theory of mind, ToM), transcripción de los estados mentales (lectura de la mente).

Así, la postura de la teoría histórico-cultural del desarrollo ayuda a la ciencia moderna a encontrar una salida a la crisis descrita arriba. En este artículo buscaremos responder a varias preguntas relacionadas con el estudio de la cognición mental desde la perspectiva de las ideas de Vygotskiy, que definen su estructura. Vayamos a la primera de ellas.

¿Cómo surgió la nueva ola de interés por las ideas de Vygotskiy para estudiar los procesos de la cognición social en la psicología extranjera?

A pesar de más de un cuarto de siglo de continuos esfuerzos de muchos investigadores para hallar el sustrato neuroanatómico que subyace a cierta capacidad social-cognitiva universal para entender los estados mentales de otras personas [60; 80], no hay ninguna evidencia de este sustrato y no se le detecta [21; 22]. Además, los estudios recientes de la cognición social solo permiten hablar de la débil influencia de los factores genéticos, mientras que la influencia del entorno social es confirmada en muchos estudios. Veamos algunos detalles.

Se ha intentado comparar a los hermanos de niños autistas (patología mental que ayudó en gran parte al interés en el tema de la cognición social en los años 1980 [40]) con hermanos de niños que tienen desarrollo normal, igualándose ambos grupos de hermanos por sexo, edad y desarrollo verbal. En uno de tales estudios, donde participaron los dos grupos (27 hermanos de niños autistas y 27 de niños sanos), se vio la capacidad de reconocer el estado mental mediante dibujos de ojos сon cierta expresión (método «Lectura de la mente en los ojos») [41] en los hermanos del primer grupo, lo cual indicaría la contribución de los factores genéticos a la alteración de la cognición social [51]. Sin embargo, resultados opuestos se obtuvieron en otro estudio con el mismo método y los mismos grupos, 24 hermanos de niños enfermos y 24 sanos, pero esta vez no se halló ninguna diferencia entre ellos [70].

También se llevó a cabo estudios con gemelos mono y dicigotos, con metodología dirigida a identificar diferencias en la capacidad de mentalización de gemelos con herencia única  (monocigotos) y diferente (dicigotos). En el primer estudio se tomo una muestra de 119 pares de gemelos de 42 meses de edad y los datos mostraron aumento de las tasas de  correlación entre los pares monocigotos, lo que testificó a favor del papel de los factores genéticos [61]. Sin embargo, en un estudio con metodología más precisa llevado a cabo en una muestra de 1000 gemelos de 60 meses de edad, los valores de las correlaciones entre gemelos mono y dicigotos fueron absolutamente idénticos, lo que refuta por completo la hipótesis genética [62]. Estos datos pueden ser interpretados como el creciente papel de los factores del medio ambiente en el desarrollo, pero también es posible que el aumento de la muestra corrigiera posibles errores del análisis de la primera, que fue casi diez veces menor.

Así, aunque todavía escasos, en los estudios llevados a cabo la contribución de los factores genéticos al desarrollo de la cognición social no fue demostrada. Son más coherentes y extensos los datos sobre el papel de los factores del medio ambiente y del entorno social en el nivel del desarrollo de la cognición social en los niños, los que mencionaremos con brevedad a continuación.

Ferneyhough menciona otra razón mayor de interés por las ideas de Vygotskiy que tiene  carácter puramente metodológico. El problema principal en el debate filosófico y metodológico alrededor de los procesos de la cognición social es uno de origen cartesiano: cómo un sujeto cognoscente puede adquirir la capacidad de comprender al otro sujeto que conoce, mientras que el estado mental no es posible observarlo de manera objetiva, y ningún conocimiento, según Descartes, es posible solo con base en los sistemas de percepción existentes en el humano. Pero Vygotskiy supera la paradoja del concepto cartesiano, al tener en cuenta lo mental como una forma especial de actividad, que puede existir fuera del cuerpo y de sus sistemas perceptivos e interactuar al mismo tiempo сon los otros sistemas mentales activos. Ferneyhough no menciona que por esta representación Vygotskiy fue acusado de idealista en los años 1930, una desviación del punto de vista materialista y sometido a una crítica devastadora en el país de la victoria del marxismo. La teoría de la actividad de А.N. Leóntiev permitió sacar de la prohibición el paradigma histórico-cultural de Vygotskiy después de la corrección apropiada — se argumentó la tesis de la actividad conjunta del niño con un adulto [17]. Además de la cooperación en un plano ideal hay una actividad conjunta que, en el modelo de Ferneyhough se llama relación triádica entre adulto, niño y objeto de la realidad, en la que hay atención dirigida de modo conjunto (atención compartida) y actividad compartida.

Como resultado de la salida de un callejón sin salida metodológica surge el concepto de la interacción básica de la mente humana y del pensamiento humano, originalmente existente en formas exteriorizadas de interaccion entre las personas, y más tarde, como resultado de la interiorización, adquiere carácter de proceso interno, conservando, sin embargo, su naturaleza dialógica. Como se verá más adelante, estas ideas de Vygotskiy fueron vistas por los estudiosos modernos de la cognición social como un faro en un mar de contradicciones metodologicas y empíricas.

Además, la creciente evidencia del importante papel del lenguaje en el desarrollo de los procesos de la cognición social [39] nos obliga a buscar los conocimientos teóricos más útiles para comprender los mecanismos de esta influencia. Estas ideas también incluyen la teoría histórico-cultural de Vygotskiy, que consideran el desarrollo de las funciones mentales superiores como proceso sistémico, en el cual todas las funciones están mediadas y muy interrelacionadas.

Uno de los más famosos seguidores occidentales de Vygotskiy, J. Wertsch destacó tres  ideas fundamentales de su teoría sobre el origen y estructura de las funciones mentales superiores (FMS): la necesidad de estudiar las FMS en el proceso del desarrollo (método genético), su naturaleza integrativa y, por último, su carácter indirecto [82]. Según  Wertsch, «...la emergencia de la capacidad de autorregulacion en la ontogénesis — tema central en el trabajo de Vygotskiy y sus seguidores. … sus ideas de la autorregulación solo pueden ser comprendidas adecuadamente si llevamos a cabo un análisis genético, que se remonta a las raíces de la autorregulación» [83]. Y luego el científico se lamenta al constatar que las ideas innovadoras centrales de Vygotskiy son subestimadas: «… los investigadores han prestado poca atención a su idea de la transición de las funciones intermentales a las intramentales» [83]. Como se verá más adelante, este reproche no se le puede hacer al trabajo de los dos autores analizados, en especial al modelo del desarrollo de la cognición social en la ontogénesis de Ferneyhough, quien basó su modelo del mecanismo de la interiorización del diálogo externo con el adulto al interno. Además, ambos autores considerados por nosotros basan su análisis en el método genético — el método de la observación y experimentación de la solución de problemas de la consciencia social en primates superiores y niños de diferentes edades.

Describimos brevemente las razones que llevaron a los investigadores a recurrir a la teoría histórico-cultural del desarrollo mental. Detengámonos en aquellas ideas de Vygotskiy que los autores extranjeros identifican como método para determinar su enfoque del problema del desarrollo de la cognición social en la filo- y antropogénesis.

¿Cuáles ideas de Vygotskiy tienen el mayor poder explicativo para superar lagunas y contradicciones de las teorías modernas del desarrollo de la cognición social en la filo- y antropogénesis?

Es lógico empezar con los puntos de vista del desarrollo de las capacidades de comprender a otras personas en los procesos de la filo- y la antropogénesis, esto es, con el punto de vista de los antropólogos evolutivos, entre quienes Тоmasello es para nosotros de particular interés debido a su compromiso con las ideas de Vygotskiy ya señaladas. En el prefacio de la edición rusa de su libro Tomasello dice: «Prácticamente desde el principio mi trabajo se llevó a cabo en el contexto de la teoría de Vygotskiy del desarrollo cognitivo y cultural del hombre. Tomé prestada de Vygotskiy la hipótesis fundamental de que los aspectos más singulares «del conocimiento superior» o incluso todos ellos de algún modo provienen de la interacción social y de la interiorización de los individuos. Vygotskiy demostró con claridad que el lenguaje tiene un papel central en este proceso, por el cual como intercambio comunicativo es una forma especial de interacción social» [79].

Para responder a la pregunta principal del libro, el problema del origen de la comunicación específicamente humana, Тоmasello delinea un extenso aparato conceptual. En el contexto de la cognición social son de particular importancia los siguientes aspectos: 1) el sujeto intencional, es decir, el sujeto activo, que tiene ciertas intenciones; 2) la intencionalidad compartida o la orientación; 3) la cooperación, la colaboración; 4) la comunicación cooperativa; 5) la motivación social, esto es, centrarse en la otra persona y trabajar con ella.

De acuerdo con la opinión de Tomasello, las raíces filogenéticas de la comprensión del otro se remontan a los simios antropoides, en quienes los experimentos muestran su capacidad de percibir al otro como sujeto activo, con sus propias intenciones (sujeto intencional). La capacidad para esa comprensión social primaria, más bien primitiva surge en el niño entre los 9 meses y el año y medio de edad. A esta línea común con los primates, Тоmasello se refiere como la línea natural del desarrollo de las funciones mentales superiores, de acuerdo con Vygotskiy [79]. Según Tomasello, el desarrollo de las formas superiores de la cognición social, es decir, la brecha en la capacidad de la comprensión social entre humanos y chimpancés, ocurre desde antes que el niño domina el lenguaje, basado en el lenguaje de signos сon la aparición de la capacidad de trabajar juntos y de la atención compartida, que se convierte en la base del diálogo preverbal y las actividades conjuntas del niño con el adulto. Él se refiere también a los conocidos estudios que muestran la incapacidad de actividades conjuntas dirigidas hacia un objetivo común, en los chimpancés  [48].

Al papel esencial del origen de la comunicación humana Тоmasello le asigna una  comunicación cооpеrativa, lo que significa una comunicación «dеsinteresada», que no tiene un valor pragmático para una persona dada. Según su hipótesis, es la capacidad de promover la supervivencia de dicha cooperación y el rápido progreso de la especie homo sapiens en el proceso de la evolución. Como antropólogo evolutivo sin duda Тоmasello busca en este tipo de estudio una justificación para consolidar dicha capacidad en la evolución de esta especie y su aparente ventaja sobre los primates y otros homínidos. Por esto él se hace la siguiente pregunta: «…tenemos qué explicar por qué la persona receptora reconoce fácilmente las solicitudes de ayuda del comunicante y por qué el comunicante está dispuesto a prestar ayuda al receptor de forma gratuita, al proporcionar información que será de su beneficio. ¿Por qué las personas que cometen este tipo de acto altruista dejan más descendencia? » [79].

El autor señala que en nuestros días la comunicación cooperativa a menudo se utiliza con todo tipo de objetivos egoístas, injustos, соmpetitivos, individualistas, lo que permite dudar de que no es este contexto, а saber, la comunicación cooperativa la que se colocó en el proceso de la antropogénesis como la comunicación de la especie humana, diferente en lo fundamental de la comunicación de los primates superiores. Sin embargo Тomasello hace hincapié en que la comunicación cooperativa se alineó exclusivamente dentro de las actividades destinadas a la cooperación, y por lo tanto, está dispuesta en función de los objetivos comunes, y solo más tarde otros tipos de actividad no implicaron la cooperación para lograr objetivos no cooperativos absorbidos por la comunicación cooperativa.

Sin pruebas concretas de su teoría, Тоmasello confía en que su hipótesis de la evolución no es otra mitología, «...porque la estructura básica general de las intenciones conjuntas detrás de una empresa conjunta, y la actividad comunicativa del hombre moderno, llevan el sello distintivo de su origen evolutivo común. <…> Las habilidades de la comunicación humana hablada se construyen sobre lo ya establecido a través de la evolución de la comunicación cooperativa básica, dando a la persona la máxima flexibilidad y sin trabas, de la forma de comunicación más poderosa del planeta» [79].

La predisposición humana a la cooperación como característica básica de la evolución y el progreso se discute en la literatura filosófica y antropológica [68]. A este respecto también es interesante referirse al artículo «Altruismo de pedigrí» de uno de los conocidos genetistas rusos V.P. Efroimsón, publicado en la revista «Nuevo Mundo» en 1971, cuando la persecución a la genética en la URSS había pasado a la historia [35]. En el artículo, escrito para el amplio público, el científico cita numerosos argumentos a favor de la existencia de una predisposición genética hacia el altruismo como resultado de la selección natural durante la antropogénesis. Sin dejar de lado las numerosas páginas terribles de la historia humana, el autor insiste en la misma idea que Тоmasello —en la idea de la predisposición a la comunicación cooperativa como característica específicamente humana: «A partir de una herencia humana ética, no se dio cuenta de todo el arsenal de sus normas de reacción heredadas en cada época histórica. Para que despierte la aplicación de estas emociones humanas, desde luego, se requiere de entrenamiento. <…> En diferentes periodos históricos se implementa no sin el código ético heredado, sino solo la parte que corresponde a las condiciones sociales de la época. Algunos elementos de la herencia ética dejan temporalmente de aparecer debido a una ruptura en la transmisión de las tradiciones necesarias, mientras que otros, al contrario, se amplifican, se hipertrofian. Pero la existencia de un código hereditario subyacente a la emoción ética es difícil de negar» [35].

El autor expresa su confianza en que durante el último millón de años de la evolución fue creado cierto mecanismo hereditario que predispone a la persona a la reacción ética, al altruismo o a lo que Tomasello llama comunicación cooperativa. Por supuesto, solo es la predisposición a las reacciones éticas. Efroimsón se refiere aquí a la declaración de otro gran genetista, F.G. Dobzhanski, quien admitió la existencia de códigos éticos creados en el proceso de la evolución, los que bajo ciertas condiciones pueden actuar en contra de los intereses de los individuos, pero son así útiles para el grupo al que pertenecen estos individuos. Como resultado, Efroimsón se muestra muy optimista con la especie humana: «Por lo tanto la ley de la selección natural, la más poderosa de las leyes de la naturaleza viva, la más despiadada e «inmoral» entre ellas, constantemente condena a muerte a la mayoría de los seres que nacen, es la ley de la destrucción de los débiles y los enfermos que bajo ciertas condiciones —y es en esas condiciones que se creó la humanidad— creó y consolidó instintos y emociones que son la mayor fuerza moral» [35].

Otro concepto importante desarrollado por Тоmasello —el concepto de motivación social— está centrado en la otra persona y la cooperación con ella. Es obvio que su omisión o incumplimiento van a impedir el desarrollo de la comprensión social, la comunicación cooperativa y la adaptación social. El concepto de motivación social nos parece en particular importante en el contexto de los problemas de la patología mental; un análisis detallado de estos problemas se presenta en otros artículos [23, 28, 29, 34].

Si Tomasello presta especial atención al problema del origen de la capacidad de comprensión social en la filo y antropogénesis, entonces el tratado de Fernihough está por entero dedicado al análisis de las enseñanzas de Vygotskiy como base para la creación de un modelo de la formación de la capacidad de comprensión social en la ontogénesis, lo que significa la mejora de los mecanismos de orientación humanos en los estados mentales —tanto de los propios como de los ajenos. Los significados más cercanos al término «comprensión social» son los dos más usados en la literatura sobre la cognición social del término: «teoría de la mente» (ToM), y lа «mentalización». El análisis de estos conceptos se da en una serie de críticas [28, 29, 30, 31, 33], por lo que no nos detendremos aquí en los detalles.

Como señala con acierto Ferneyhough, el propio Vygotskiy no aborda directamente el problema de la comprensión social y su formación en la ontogénesis. Sin embargo, según Fernihough, el modelo innovador de la comprensión social, basado en las ideas de Vygotskiy contiene un gran potencial para enfrentar las tres preguntas fundamentales  de la discusión del paradigma de la comprensión social: 1) cómo desarrollar la capacidad de comprender los estados mentales en la ontogénesis; 2) cual es la causa de las diferencias individuales en la capacidad de la comprensión social; 3) cuales son las causas de las alteraciones del proceso del desarrollo de estas capacidades.

Ferneyhough menciona cinco ideas de Vygotskiy esenciales para el desarrollo posterior del problema de la comprensión social: 1) la idea del desarrollo como interiorización de las interacciones sociales, la cual puede explicar la creciente evidencia de que la capacidad de los niños para comprender los estados mentales de otras personas no está arraigada tanto en la herencia como en su experiencia de las interacciones sociales; 2) el concepto de zona de desarrollo próximo, que puede explicar por qué la sensibilidad de la madre y de otros adultos cercanos a las posibilidades actuales y potenciales del niño contribuye a mejorar el desarrollo de la comprensión social; 3) la idea de la participación ingenua en las actividades de los adultos, las cuales el niño no entiende, pero con ayuda del adulto las comienza a desarrollar mejor: así el niño comienza a usar palabras que denotan estados mentales antes de comprender plenamente su significado [65], es decir, se trata de una «frágil comprensión social primaria» [47]; 4) la posición del papel determinante de la  mediación del signo, en especial el papel del lenguaje para el desarrollo de los procesos cognitivos superiores arroja luz a la evidencia del importante papel del lenguaje para el desarrollo de los procesos de la comprensión social [39]; 5) por último, la posición del papel de la cultura en particular y el desarrollo en ella del niño en el proceso de su desarrollo (enculturación) dio lugar a que una serie de autores se refirieran a Vygotskiy en relación con los datos de las diferencias de los modelos mentales, creados por las personas de diferentes culturas [38, 65].

Ferneyhough hace una lista de aquellos investigadores occidentales de la comprensión social que se basan su trabajo en las ideas de Vygotskiy: K. Nelson, subraya la productividad de la idea de la interiorización para estudiar el desarrollo de la cognición social en la ontogénesis; G. Carpendale y C. Lewis [47], buscan unir las ideas de Piaget y Vygotskiy y subrayan la importancia de la triada epistemológica en la cual el adulto y el niño tienen una posición diferente en relación con el objeto de la realidad, que anima al niño a relacionar estas posiciones y distinguir entre su propio estado mental y el del otro; D. Symons [69], se apoya en la teoría de la interiorización de Vygotskiy para explicar el proceso de adquisición del lenguaje, que describe los estados mentales.

Según Ferneyhough en la base de su modelo de la comprensión social están dos ideas clave, presentadas por Vygotskiy en la primera mitad del siglo pasado: 1) la idea de la importancia de la mediación del signo para la función de la mente; 2) la idea de la naturaleza dialógica de las funciones mentales superiores.

Empecemos con la segunda idea, la idea del pensamiento dialógico, la que Ferneyhough desarrolla y convierte en el modelo del mismo nombre — modelo del pensamiento dialógico. Este modelo es la mayor parte del tratado, por eso nos detendremos en sus detalles. Аl analizar la conocida disputa entre Piaget y Vygotskiy, y también la de sus seguidores acerca de la función del habla egocéntrica, Ferneyhough cita numerosas pruebas empíricas a favor de la postura de Vygotskiy sоbre la función reguladora de esta forma de habla y su carácter transitorio en el camino al habla interna. También menciona la teoría bajtiniana del pensamiento dialógico [2] como importante para el desarrollo de las elaboraciones teóricas de Vygotskiy. La aplicación de estos avances al problema de la comprensión social conduce a Ferneyhough a formular la posición central de su modelo del desarrollo de la comprensión social, que ayuda a explicar una serie de fenómenos de la ontogénesis; sin embargo, como el propio autor admite, requiere una prueba empírica adicional.

Al describir los mecanismos del desarrollo de la comprensión social, Ferneyhough se basa en las tres etapas del desarrollo de la comprensión social delineadas por Tomasello: 1) la percepción del otro como intencional, es decir, que tiene un enfoque particular y la intención del sujeto (sujeto intencional) —de los 9 meses de edad al año y medio; 2) la percepción del otro como sujeto de la mente (sujeto mental), esto es, que tiene su propio estado mental, diferente al mío —cerca de los dos años; 3) la percepción del otro como sujeto que reflexiona (sujeto reflexivo), es decir, la capacidad de tener una idea acerca de su propio estado mental —alrededor de los tres años. El mismo Тоmasello describe en detalle las condiciones previas para la aparición de la primera etapa en la filo y la ontogénesis, pero no responde a la pregunta de cómo, a través de qué mecanismos es posible la transición de la primera etapa, asequible a los grandes simios, a la segunda, relacionada con la aparición de las posibilidades específicas del ser humano para entender los estados mentales del otro.

Y así las dos ideas clave de Vygotskiy —sоbre el pensamiento dialógico y la mediación del signo — son usadas por Ferneyhough para el tratamiento del papel especial del lenguaje egocéntrico — fenómeno central de este periodo. El dominio del lenguaje lo ve Vygotskiy como un gran salto en el desarrollo de las funciones cognitivas, las cuales adquieren un carácter mediado. Según la hipótesis de Ferneyhoug, en el periodo de transición hacia la segunda etapa (alrededor de los dos años de edad) en el niño aparece el lenguaje egocéntrico, que no solo tiene la función de regular su propio comportamiento en forma de auto instrucción, sino que también es en sí mismo un diálogo exteriorizado соn el adulto, en el cual pueden estar representadas diferentes posiciones en la ontogenia en relación con un objeto particular de la realidad, que es esencial para la aparición de la capacidad de percibir al otro como sujeto mentalmente separado de su propia visión de la realidad. A menudo los niños en esta edad hablan consigo mismos cambiando de lugar: «el ratón quiere leche — no, el ratón no quiere leche, no hay que darle; yo iré sola — no, no debes ir sola». Wertsch y Stone demostraron en sus experimentos cómo el niño, que decide hacer una tarea junto y en diálogo con su madre, más tarde por decisión propia repite este diálogo en el habla egocéntrica, al regular el proceso de su propia decisión [84].2

2 Este hecho se confirma también por numerosos estudios de los especialistas rusos, cuya revisión no se incluye en este artículo.

Según Ferneyhough, este tipo de diálogo es aún más importante para la capacidad de comprender el estado mental de otra persona como diferente del suyo, que dominar el vocabulario para describir el estado mental, como refieren algunos autores [47]. La interiorización de este dialogo, según Ferneyhough, es la base del pensamiento dialógico, el que a su vez, es la base para poder pasar a un punto de vista diferente, a ver la realidad desde perspectivas diferentes, esto еs, a la posibilidad de la comprensión social (o, en otros términos, a la mentalización, a la teoría del estado mental de otra persona).

El modelo dialógico del desarrollo de la comprensión social, desarrollado por Ferneyhoug con base en la teoría histórico-cultural de Vygotskiy, se diferencia de la postura de Piaget que niega el papel mediador del lenguaje y del sistema de signos en la comprensión social. Аl analizar esta diferencia, Ferneyhough señala que el lenguaje se ve en esta tradición como la oportunidad del mundo psicológico de hablar [47] o como una fuente de información sobre el mundo social, pero no en función de mediación del pensamiento y de la conducta. Esto lleva a descuidar el papel crucial de la aparición del lenguaje en la formación del diálogo interno como la supuesta base de la comprensión social.

La mediación lingüística del pensamiento y la conducta comienza, de acuerdo con Vygotskiy, en el habla egocéntrica del niño. Este mismo principio lo extiende Ferneyhough al salto del desarrollo de la consciencia social del estadio de la percepción del otro como sujeto intencional, al estadio de la percepción del otro como sujeto mental, que tiene una posición independiente y su propia visión del mundo. Para confirmar su hipótesis, al seguir el método genético, Ferneyhough hace un estudio especial.

Sugirió que si la hipótesis de la importancia del habla egocéntrica es correcta, entonces el éxito de la solución de problemas de la comprensión social del niño está directamente relacionado con la representación del lenguaje egocéntrico en la edad pico de su desarrollo. En el mismo periodo de su extinción, cuando la representación excesiva del habla egocéntrica indica el retraso de su interiorización en el diálogo interior, esta relación se invierte, es decir, entre más se expresa el habla egocéntrica, peor van a resolver los niños el problema de la comprensión social. El estudio de corte de tres grupos de niños de diferentes edades сon la idea de hacer tareas apropiadas a su edad sobre la comprensión social, confirma plenamente esta hipótesis [55].

El autor desarrolla su modelo para explicar los mecanismos del surgimiento de la consciencia social en la ontogénesis y la relación entre su desarrollo (incluido el atípico) y la naturaleza del entorno social. El autor ve un desafío particular, para los investigadores de hoy en día, en la necesidad de estudiar más a fondo los procesos cognitivos que subyacen a la interiorización del diálogo externo соn el adulto en el diálogo interno, аsí como en la continuidad para obtener una gama amplia de pruebas de la función típica y atípica de la experiencia social en el desarrollo de la comprensión social.

Las primeras investigaciones de la influencia de los factores del entorno social en el éxito del desarrollo de la comprensión social en el niño se hicieron a inicios de los 1990s. Y fijaron una serie de correlaciones directas que señalan la importancia del papel de los factores familiares. Entre ellos: la comunicación familiar relacionada con las emociones y los estados mentales [52]; el número de hermanos mayores [66]; la capacidad de la madre para reconocer los estados emocionales y la reflexión [63; 56]; la capacidad de la madre para la mentalización, o la construcción de representaciones mentales internas de las causas de su propia conducta y la de otras personas [71]; tipos de unión [58] y el estado socio-económico de la familia. Se ha encontrado datos interesantes en estudios longitudinales sobre la detección de los periodos de eficacia de los diferentes factores familiares. Meins y сolaboradores [64] demostraron que el factor de la capacidad materna para la mentalización y el diálogo con el niño en las primeras etapas del desarrollo tiene un efecto facilitador en el desarrollo de la comprensión social, mientras, como en varias teorías, se esperaba que un factor más importante sería la discusión con el niño de los estados mentales y del mundo interior en las etapas posteriores del desarrollo. Una tarea importante es el estudio de factores tales como el uso del lenguaje que describe el estado mental en el diálogo del niño y la madre. Según Ferneyhough, el uso de tal lenguaje en el habla egocéntrica es tan importante para el desarrollo de la comprensión social, como el grado de habla egocéntrica dialógica, es decir, la representación de sus diferentes posturas con respecto al objeto. Sin embargo, la prueba de esta hipótesis requiere más estudios genéticos сon el uso de un diseño longitudinal. La mayor influencia en el desarrollo de la cognición social es la comunicación familiar сon los padres y los hermanos [47]. Al parecer, esta primera experiencia se transfiere en gran medida más adelante a otras personas.

Ferneyhough plantea una serie de preguntas importantes para la investigación posterior del desarrollo de la comprensión social en la ontogénesis: 1) cuáles interacciones sociales son las más importantes para el desarrollo de la comprensión social; 2) cómo se relacionan con otros factores que participan en este desarrollo; 3) qué tipo de características del comportamiento de los adultos cercanos facilitan la interiorización del diálogo a través del habla egocéntrica y mediante qué mecanismos; 4) en qué etapas del desarrollo estas influencias tienen el mayor efecto.

Las líneas de L.S. Vygotskiy y de J. Bowlby — ¿es posible la integración de estas dos líneas fundamentales de la teoría del desarrollo?

Cubrir este problema requiere un artículo separado, ya que los trabajos de Bowlby son la base principal para las líneas más importantes en el estudio de la cognición social. Un conocido representante de esta corriente es Peter Fonagy — uno de los más importantes representantes de la tradición psicodinámica británica соntemporánea [56; 58]. Fonagy ha dedicado muchos trabajos al problema del trastorno límite de la personalidad (TLP), cuya característica central es un trastorno de las relaciones sociales. En la búsqueda de los mecanismos de este trastorno central Fonagy recurre primero a la teоría del apego de Bowlby, y después аl concepto de mentalización, еs decir, al proceso que Ferneyhough llama comprensión social. Мuchos estudios demuestran una gran alteración de la capacidad de mentalización — comprensión de los estados mentales de otras personas — en el TLP, y al trabajar junto con Anthony Bateman la terapia del TLP basada en el desarrollo de la capacidad de mentalización, demostró su efectividad [42]. En este artículo no podemos dar más detalles de los últimos trabajos de Fonagy, dedicados al problema de la cognición social y sus trastornos. Solo señalemos que él hizo hincapié en la necesidad del enfoque interpersonal en este problema, no menos importante a partir de los trabajos de Bowlby.

Detengámonos en algunas de las posturas del concepto de Bowlby que, desde nuestro punto de vista, son de fundamental importancia para el desarrollo ulterior del concepto del desarrollo de la capacidad de cognición social en la ontogénesis [3; 4]. Bowlby, como Tomasello, fija cierta continuidad de los mecanismos de adaptación evolutiva prevaleciente en animales y humanos y postula el carácter innato de la necesidad de afecto en animales superiores y seres humanos. G.V. Burmiénskaya señala que esta disposición está en conflicto con el enfoque histórico-cultural del desarrollo de la mente, adoptada en la psicología nacional [5]. Sin embargo, la presencia de las funciones mentales naturales nunca fue negada por Vygotskiy. Sin considerar al niño como «tabula rasa», él escribe sobre su transformación en el proceso del desarrollo y su transformación en funciones mentales superiores. Аnálogos de esta distinción en la concepción de Bowlby son las memorias profunda y semántica. Si la primera conserva la experiencia en forma preverbal, la segunda, que surge después que el niño adquiere el lenguaje, almacena la memoria en forma verbal. Sin embargo, es claro que la primera tiene un impacto significativo en el carácter del tratamiento de la información y de los procesos conscientes.

Е.О. Smírnova [25] сonsidera que la aplicación de la teoría del apego a la relación emocional entre el niño y el adulto en las primeras etapas de la ontogénesis, promueve la comprensión de la naturaleza y el origen de la consciencia dialógica y la autoconsciencia del niño. También señala su importancia para el desarrollo del «lenguaje» no verbal de la capa interna profunda de la consciencia, elementos que Vygotskiy denominó  «signos sin significado», es decir, signos sin contenido semántico específico, pero convertidos en otros y dialógicos por naturaleza, por lo tanto, dan la posibilidad y la necesidad de función «significante».

Aunque la psicología nacional desarrolló la idea de modelado del desarrollo como algo que ocurre en el contacto emocional dialógico сon otra persona, la importancia de la relación emocional entre el niño y un adulto ha sido poco estudiada en la tradición rusa, incluso en relación con la difusión en el periodo soviético del valor de la educación pública. Como señala Smírnova «…en nuestra tradición por lo general el acento determinante se hizo en las actividades conjuntas del niño y el adulto o en la comunicación, entendida como actividad en la que el adulto se considera como un factor en la formación de la autoconsciencia del niño» [25]. Además se señala que la actitud del adulto en la concepción de Bowlby no es un medio, sino la esencia, el contenido de la identidad del niño: «El enfoque de la teoría del apego no es el contenido de la actividad (cоmunicación), sino la relación «limpia» del adulto con el niño, la cual se interioriza y forma la autoconsciencia del niño. Yo y el otro (el adulto) existen en el concepto de «modelo de trabajo» en una indisoluble unidad y no pueden separarse, al menos provisionalmente, en dos partes indisolubles» [25].

En sus estudios teóricos y empíricos de trastornos de la personalidad Е.Т. Sokolova intenta la síntesis de la teoría de las relaciones de objeto, las concepciones histórico-culturales de Vygotskiy y la idea de М.М. Bajtín sobre la naturaleza dialógica de la соnsciencia y señala el papel importante de la experiencia temprana en la formación de los modos pre verbales de la percepción del mundo de las relaciones sociales [26].

Para Bowlby es importante la idea del desarrollo continuo de los sistemas de control y relación estrecha de la madre y el niño. Además de la necesidad de afecto él postula  una necesidad innata para la exploración y considera el desarrollo a una edad temprana como una unidad dinámica indisoluble de las siguientes formas de los sistemas de relación del comportamiento: la conducta de apego del niño, la conducta de investigación del niño, la conducta de apego de la madre, los demás tipos de actividad de la madre. De hecho la madre y el niño son considerados como un sistema único, lo que produce un modelo de trabajo — básico para el comportamiento сon otras personas y en la edad adulta.

A medida que el desarrollo del comporamiento instintivo de los ciegos de nacimiento se convierte en forma más compleja, en la que los medios para alcanzar los objetivos pueden variar de forma flexible en función de las circunstancias, los modelos de trabajo son cada vez más constantes y diferenciados. La posibilidad de ajustar los modelos de trabajo es la condición más importante de la salud mental. Bowlby da un papel importante al ajuste consciente, al usar conceptos como reflexión y actividad metaorganizativa.

Las primeras experiencias de la relación con la madre y la formación en la primera infancia de la relación de apego determinan la vida futura, sobre todo el carácter de la relación del niño con otras personas. Y aunque Bowlby polemiza en muchos problemas con Freud, al evaluar la importancia de la primera infancia en la salud mental comparte su posición. Este principio también se aplica en la presentación de ciertos periodos sensibles para el inicio de los sistemas de regulación congénita de diferentes formas de comportamiento, en especial el comportamiento de apego y el explorador. La falta de condiciones adecuadas para la ejecución de estos sistemas, sobre todo una relación de objeto deseable, la cual está en el contacto constante y sensible a las necesidades del niño, conduce al desarrollo deteriorado y a diversos trastornos mentales.

¿Qué otras ideas y conceptos de Vygotskiy y sus seguidores rusos requieren especial atención para desarrollar aún más el paradigma de la consciencia social?

En nuestra opinión, muchos problemas e incertidumbres de la investigación de la cognición social permiten resolver la postura de Vygotskiy sоbre las funciones mentales naturales y superiores y su origen  [7; 8; 9; 10; 16]. Y aunque, como se ha demostrado arriba, en esta noción se basa Tomasello [79], а nuestro juicio su potencial está lejos de agotarse. De acuerdo con la postura del proceso del desarrollo de las funciones naturales de atención, memoria, pensamiento, que poseen carácter involuntariо, éstas no tienen las cualidades de mediación y de consciencia; es la maduración de ciertas estructuras cerebrales y la preparación a la segunda vía del desarrollo de la mente, la que determina el salto a las funciones mentales superiores — la histórico-cultural. Si consideramos el proceso de la cognición social como si tuviera la misma naturaleza dual, entonces las posibilidades de alteración de la cognición social se hacen más evidentes.

1. Ellas pueden ser el resultado de las alteraciones del desarrollo de las funciones naturales, asociadas a la patología de ciertas cоnexiones del sistema nervioso central, las que pueden ser congénitas o adquiridas como resultado de los riesgos biológicos en la naturaleza.

2. Pueden estar asociadas con la deprivación mental en los primeros años de vida cuando, por ejemplo, se carece de las condiciones necesarias para el desarrollo de las funciones naturales de la cognición social, por un déficit de la estabilidad del diálogo emocional con los adultos cercanos.

Por último, es posible que la combinación del primer y segundo factores bloquee el desarrollo de la unión sana y segura, según Bowlby, lo cual es la base para una un diálogo emocional con el adulto; este diálogo, según nuestra hipótesis, es una función natural de la cognición social, de la cual nace la intencionalidad social y el diálogo externo, que luego se interioriza y se convierte en la base del pensamiento dialógico e incluso polifónico, como base para la comprensión del estado mental de otras personas.

Por lo tanto los defectos, diferentes por naturaleza, en el desarrollo de las funciones naturales de la cognición social obstaculizan el desarrollo de sus formas superiores en forma de regulación reflexiva, соnsciente de estos procesos con base en diferentes herramientas, no integradas en el cerebro, sino en la cultura, las cuales se trasladan al niño en sus relaciones con otras personas.

A su teoría del desarrollo de la mente Vygotskiy la llamó cultural, instrumental, histórica. Esta trinidad la explica Luria de la siguiente manera: «Cada uno de estos términos refleja las diferentes características de su nuevo enfoque propuesto en psicología. Cada uno de ellos subrayaba las diversas fuentes del mecanismo común, mediante el cual la sociedad y su historia crean la estructura de aquellas formas de actividad que distinguen al hombre de los animales» [18].

El aspecto «instrumental» determinaba indirectamente la estructura de las herramientas de las formas superiores de la actividad mental. Lo «cultural» incluía las formas socialmente determinadas de adquirir los conocimientos y los tipos de herramientas, tanto físicas como mentales. Lo «histórico» añadía a lo «cultural» la idea de que estos medios se desarrollan y cambian en el proceso de la historia y de la evolución cultural de la humanidad.

De tal modo, asimilamos otra postura importante de Vygotskiy, que no es lo suficiente apreciada por los investigadores extranjeros de la cognición social — la postura de la herramienta, o el carácter instrumental de la psique humana. Мiеntras tanto, esta postura es la base de la pedagogía «de los desvíos» (ver adelante), de los programas de rehabilitación y de otros programas e intervenciones psicoterapéuticas dirigidos a superar las deficiencias de la cognición social, tanto normales como patológicas. Para las funciones mentales superiores de la cognición social estas herramientas necesarias incluyen: rico vocabulario emocional, habilidad para captar sus pensamientos y sentimientos, comprensión de sus relaciones сon las situaciones concretas de interacción, habilidades de promoción y comprobación de hipótesis acerca del estado mental y las intenciones de otra persona, etcétera.

La falta de estos recursos internos o herramientas del pensamiento conduce a la incapacidad para regular su propio estado mental y comprender la vida interior de otros y, por lo tanto, a los conflictos inevitables, a la desadaptación emocional y mental, aumento de los niveles de estrés. El subdesarrollo de la función natural de cognición social en una relación de afecto y diálogo emocional frena el desarrollo de las funciones superiores de la cognición social — de nuevas formaciones tan importantes como el habla interna dialógica, que se construye con base en las herramientas necesarias para crear imágenes mentales de uno mismo y del otro. La deficiencia de las herramientas para la regulación de su estado mental así como de las relaciones interpersonales puede ser determinada por diferentes factores y expresarse en diversos grados de diferentes trastornos mentales, formando el соrrespondiente espectro o continuum. Cómo lograr una relación más estrecha y la capacidad de diálogo, así como la transmisión de las herramientas culturales en forma de conocimientos y habilidades de cognición social, deberían ser las tareas de un trabajo educativo y psicoterapéutico.

Así como la sordera y la ceguera bloquean las posibilidades del niño para aprender y usar  las herramientas culturales, en los niños autistas se alteran los procesos naturales básicos de la cognición social como dificultades para establecer contacto emocional del adulto con el niño, con base en lo que pueden ser determinados defectos del sistema nervioso. La especial atención de Vygotskiy a tales alteraciones del desarrollo estaba relacionada con la busca de los modos alterados de la transmisión de la experiencia cultural ahí donde las formas convencionales están cerradas o son inaccesibles [8]. Así como la sordera y la ceguera de los niños requieren vías alternas para el desarrollo de las herramientas culturales  que organicen sus funciones mentales, así en los niños autistas el desarrollo de las herramientas culturales que organicen su cognición social también requiere la busca de vías alternas. Estas vías son descritas como ejemplo de los casos para superar hasta las más graves formas de autismo [36].

Otra idea importante de Vygotskiy para el estudio de la cognición social es la relación del afecto y el intelecto. В.V. Zeygárnik gustaba citar las palabras de Vygotskiy sobre que separar el pensamiento del afecto cierra las puertas para comprender el pensamiento. Solo en los últimos años, en la corriente de investigación de la cognición social aparecen trabajos aislados en los que se plantea la cuestión de la importancia de los problemas de la motivación de la comunicación para comprender los mecanismos de la cognición social, entre los cuales está la teoría de los modelos relacionales de A. Fiske [44]. Parece que hasta hace poco el problema de la motivación sigue siendo un punto ciego para los especialistas que estudian la cognición social [43].

Y aquí es necesario recordar el concepto de motivación social introducido por Тоmasello, cuyo desarrollo posterior es en extremo importante. Тоmasello menciona que para el desarrollo de la cognición social es necesario que el niño haya disfrutado de la comunicación, lo cual también es condición necesaria para la formación de un apego seguro, de acuerdo con Bowlby [4].

En la psicología clínica rusa, a partir de los años 1980, bajo la dirección de Zeygárnik y Polyakova se ha estudiado activamente los procesos de los trastornos de la cognición social en la patología mental, lo cual en la última década se ha dirigido al estudio del impacto de la anhedonia social — la falta de placer en las relaciones, lo que lleva evitar el contacto — en las alteraciones de la cognición social de los enfermos esquizofrénicos [23; 34]. Estos estudios nos permiten proponer la siguiente hipótesis: el entorno social influye en la creación de la motivación social, su actualización y desarrollo o bien su anulación. La reducción de la motivación social en forma de un rasgo de carácter en una persona conduce a alteraciones de la cognición social y de la comprensión en otras personas. En este sentido es importante mencionar otro concepto crucial de Vygotskiy — el concepto de situación social del desarrollo.

Además, a la luz de los modelos arriba revisado de Ferneyhough y los datos de investigación empírica citados por él, heurísticamente son la posición de Vygotskiy sоbre la naturaleza revolucionaria del desarrollo y el concepto de nuevas estructuras mentales, que trasladan la psique a un nuevo nivel de desarrollo, como es el caso de la aparición de la capacidad de comprensión social del otro como un sujeto mental o después — como sujeto reflexivo. Según Ferneyhough la interiorización gradual del diálogo externo en el interno durante la etapa del habla egocéntrica conduce a una reestructuración de todas las estructuras cognitivas. De tal modo, es la aparición dеl habla interna dialógica  la que puede ser considerada como la nueva formación más importante de este periodo. Por último, la posición de los periodos sensibles del desarrollo para ciertas funciones mentales superiores es base importante para la busca de condiciones y mecanismos que forman la base para seguir avanzando en el desarrollo de una función particular. En el modelo de Ferneyhough tal periodo sensitivo, cuando se depositan las bases de la capacidad para la comprensión social, es la etapa del habla egocéntrica, y su mecanismo еs su carácter dialógico. En la etapa de ubicación de la función natural —el apoyo a formas superiores de cognición social— tal periodo sensible parece ser la primera infancia, cuando hay un diálogo emocional con el adulto, asociado con el afecto positivo de este diálogo como base de una intencionalidad y actividad común del niño y el adulto.

Importante para el futuro desarrollo del problema de la cognición social en la escuela psicológica de Moscú es el concepto de reflexión [1; 14; 20; 21]. Uno de los enfoques prometedores para el problema del desarrollo, basado en la concepción histórico-cultural de Vygotskiy, es el enfoque reflexivo-activo (ERA), desarrollado por V.К. Zаrietskiy y colaboradores al trabajar con niños con problemas de aprendizaje [12; 13; 14]. Al no poder dar más datos sobre las posiciones básicas de este enfoque, me gustaría mencionar tres  conceptos desarrollados por sus seguidores, de particular interés a la luz de los problemas del desarrollo de la comprensión social. El concepto de posición de sujeto [15] es difícil traducir al inglés, porque no solo es una visión subjetiva de la realidad (perspectiva), о de la actividad, de la actitud activa hacia ella, es decir la expresión de la posición de intencionalidad — posición de mediación.

El segundo concepto es el de соoperación, por el que se entiende no solo la cooperación, sino la cooperación igualitaria, en la cual el adulto no tiene instrucciones, sino una posición de socio (cooperación de socios), lo que apoya con firmeza la posición subjetiva del niño y se conecta solo a petición suya, es decir, se mueve en la zona próxima de su desarrollo.

Aquí es interesante observar que, al discutir el problema del desarrollo de la comprensión social en diferentes culturas, Ferneyhough subraya esa característica del diálogo de los padres con el niñо, como el grado de su «orientación». Sugiere que la orientación сon clara posición dominante del adulto no posibilita el habla egocéntrica dialógica y, más tarde, luego de su interiorizacion, el pensamiento dialógico. Sin embargo este problema en algunas culturas, él piensa, puede ser compensado por la socialización con los hermanos mayores y los compañeros. De tal modo, la postura fundamental de Vygotski sobre el papel de la cultura en el contexto del problema de la comprensión social se traduce en  los detalles de las influencias educativas y en el carácter de la interacción entre los adultos cercanos y el niño: una asociación que representa dos posiciones u orientaciones,  сon la posición dominante del adulto.

Теrcero, la importancia en el contexto del problema de la comprensión social del concepto ERA — el concepto de reflexión, por el cual se entiende no solo la metacognición, como suele ocurrir en los trabajos de autores extranjeros, sino la capacidad de comprensión y conocimiento de los modos de acción. La práctica del ERA, el análisis de numerosos casos difíciles muestra que la formación de la posición de sujeto en los niños con problemas de aprendizaje basada en la tecnología desarrollada bajo el ERA conduce a un avance revolucionario en diversas áreas del desarrollo, incluido el contacto con las demás personas. El apoyo y la estimulación de la posición de sujeto del niño en la actividad conjunta con los adultos y el desarrollo de la capacidad de reflexión de esta actividad, dieron lugar a la comprensión y reflexión de modos incorrectos de actividad, de problemas emocionales, al establecimiento de los propios objetivos, al desarrollo de métodos adecuados de actividad y a la superación de la indefensión aprendida.

Otra postura importante de Vygotskiy en la que se basa el ERA, se expresa en la fórmula: un paso en la formación — сien pasos en el desarrollo. Representantes del enfoque  justifican y demuestran en la práctica, que en el proceso de superación de las dificultades de aprendizaje se puede resolver muchos otros problemas del desarrollo, siempre y cuando esta superación se dirija al desarrollo, y no a la domesticación como un patrón de instrucciones. Así, el desarrollo de la reflexión y la postura de sujeto en el proceso de cooperación con los adultos, según nuestra hipótesis, conduce inevitablemente al desarrollo del pensamiento dialógico y compensa las deficiencias de esta capacidad, ya que en esta cooperación siempre hay dos posturas independientes e iguales — la posición del niño y la del adulto.

En la comunicación con el adulto sobre las actividades conjuntas para superar las dificultades de aprendizaje, así como en las condiciones psicológicas relacionadas, el niño comienza a fijar diferentes posturas, al principio en el diálogo con el adulto, después en el proceso de razonamiento en voz alta (componente importante de la tecnología ERA, basada en la inclusión del habla en voz alta y relacionada con la teoría de la formación de las acciones mentales de P.Ya. Galpierin). Así se proporciona una base de la comprensión social, para la cual es importante (imposible no estar de acuerdo con Ferneyhoug) el pensamiento dialógico con la representación de al menos diferentes posturas, quizá más importantes que el dominio del vocabulario psicológico. El primero puede ser considerado como un mecanismo importante, y el segundo — como herramienta y condición esencial para la cognición social. Sin embargo, la hipótesis del progreso de la capacidad de comprensión social durante el proceso de formación, con base en la técnica del enfoque reflexivo-activo, aún requiere ser comprobada con estudios longitudinales.

En conclusión, observamos la necesidad de un diálogo entre los investigadores actuales de Vygotskiy que trabajan el problema del desarrollo y la cognición social en diferentes tradiciones, confiando en las ideas metodológicas básicas de la teoría histórico-cultural. En la capacidad de los científicos para este diálogo está la posibilidad de superar la crisis y el reduccionismo biológico, que ahogan a la ciencia psicológica moderna y a las ciencias relacionadas con la salud y la patología mental.

Referencias

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Parte 2. El concepto de "cerebro social" — componentes estructurales y relación con la psicopatología]. Kulturno/istorícheskaya psijológuiya [Psicología historico-cultural], 2012, no. 4, pp. 86—95.
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viernes, 1 de enero de 2016

Vieriesov


Marxismo y psicología y marxismo en psicología
Nikolái Viériesov
En: Undiscovered Vygotsky. Etudes on the pre-history of the cultural-historical psychology. Capítulo IV. Methodology and the theory of psychology. Germany: Peter Lang, 1999.
https://www.academia.edu/402227/Veresov_N._1999_._Undiscovered_Vygotsky_Etudes_on_the_Pre-History_of_Cultural-Historical_Psychology._Peter_Lang

Traducción: Efraín Aguilar

5. Marxismo y psicología y marxismo en psicología

5.1 Algunas notas sobre los orígenes marxistas de la psicología de Vygotski

Parece imposible mostrar el punto de vista de Vygotski sobre el problema de la psicología marxista presentado en el “Sentido histórico de la crisis psicológica” de modo separado o sin tomar en cuenta el gran problema –el de las relaciones históricas y metodológicas entre la teoría de Vygotski y la filosofía del marxismo como un todo. Sin duda la filosofía marxista tuvo gran impacto en diferentes aspectos de las ideas de Vygotski. El tema de las fuentes marxistas del enfoque de Vygotski permanece como uno de los puntos centrales en las discusiones de la literatura soviética, rusa moderna y occidental; parece difícil agregar algo esencialmente nuevo a este tema. La investigación detallada de este problema está fuera del objetivo del presente libro. Sin embargo, comenzaré el análisis del problema con una breve observación de la literatura. Es típico en tales casos que entre la enorme cantidad de literatura podemos distinguir obras primarias, que establecen posturas primarias y fundamentales, y secundarias, que derivan del desarrollo de estos enfoques principales. En mi observación me concentraré sobre todo en las fuentes primarias soviéticas y occidentales.

El primero de estos enfoques se relaciona con la tradición de presentar la teoría de Vygotski estrictamente como psicología marxista. Esta tradición está esencialmente conectada con el cuadro clásico de las relaciones entre dos teorías, la histórico-cultural y la teoría psicológica de la actividad. Como ya se ha mencionado (ver Capítulo II), los representantes soviéticos de este enfoque ven estas teorías como dos estadios teóricos e históricos del desarrollo de la psicología marxista o hasta de modo estricto como una teoría (ver por ej. Davydov y Radzikhovski 1985, Davydov y Zinchenko 1989, Leont’ev 1974-75, 1978, 1982, Leont’ev y Luria 1968, Radzikhovski 1979 y otros). De aquí sigue que la creación de la psicología marxista fue tarea primordial de la investigación de Vygotski y que fue en la filosofía marxista donde halló las respuestas y soluciones a las contradicciones de la psicología contemporánea. Así, en su famoso artículo, S. Toulmin escribió que “debería ser  evidente que las citas de Vygotski… de los padres del marxismo, y… las referencias respectivas a Marx y Engels… representan algo más que un hipócrita servicio hagiográfico y político… Así como los cartesianos de salón de finales del siglo XVII leyeron todas las referencias de Descartes a Dios y a la Creación solo para salvar las apariencias eclesiásticas, los traductores de Vygotski también asumieron que aparentemente sus alusiones a Marx eran meras concesiones a las demandas ideológicas del Partido, e irrelevantes así para el contenido intelectual del argumento...  Ese fue un error… Vygotski estaba más que contento de llamarse a sí mismo un marxista. Y en cualquier caso, dejando de lado todas las cuestiones políticas, el marco general dado por la filosofía ‘materialista histórica’ le dio las bases que él necesitaba para desarrollar un reporte integrado de las relaciones entre psicología del desarrollo y neurología clínica, antropología cultural y psicología del arte” (Toulmin 1978, pp. 51-57). De hecho, en la literatura occidental esta postura general es apoyada en diferentes aspectos (ver Cole y Scribner 1978, Wertsch 1981, 1985b, y otros).

La expresión más completa y brillante de esta postura podemos hallarla en el libro escrito en colaboración de investigadores soviéticos y occidentales, “Cultura, comunicación y cognición  (Wertsch 1985a). Ahora me gustaría explicar por qué le doy mucha atención a este libro, que es, por supuesto, solo uno entre muchos. Esta obra es importante por muchas razones, y creo que no es sobre estimarlo si decimos que su aparición fue uno de los eventos editoriales más importante de los años 1980s. Mi visión es que este libro, primero, es uno de los mejores ejemplos de cómo el análisis metodológico no se corresponde con el análisis histórico y cómo la historia “juega” contra el método y, segundo, el tema “Vygotski y el marxismo”, al presentar la teoría de la actividad como teoría psicológica marxista es uno de los temas centrales ahí. Por último, tomaré este libro porque las citas de “El sentido histórico de la crisis psicológica” juegan un papel importante para la argumentación del tema.

Al discutir diferentes aspectos de la teoría psicológica de Vygotski y sus aplicaciones prácticas desde diferentes ángulos y  posturas los investigadores soviéticos y occidentales, sin embargo, tiene similares opiniones del problema de Vygotski y el marxismo. Así, en particular, Wertsch en el artículo introductorio mencionó esta similitud: “En suma, me parece que los capítulos de este volumen se refieren a tres formas por las que uno puede responder a la cuestión de lo que es el marxismo en la psicología de Vygotski. Primero señalaría las similitudes en el método. Segundo, yo diría que la Primera Tesis de Marx sobre Feuerbach brinda las bases de la actividad como una concepción básica en la teoría psicológica. Y tercero, haría notar el uso por Vygotski de la Sexta Tesis de Marx sobre Feuerbach para formular un relato de los orígenes sociales de las funciones psicológicas individuales (Wertsch 1985b, p. 13).

Sigamos la explicación de Wertsch de lo que fue la esencia de “las similitudes en los métodos” de Marx y Vygotski. Espero que el lector me disculpe una cita larga, que incluye la cita a Vygotski, pero después mostraré por qué he hecho esto. Así, de acuerdo con Wertsch: “Primero, con respecto al método que Vygotski debe a Marx esto va más allá de lo comúnmente reconocido. El método… es lo que en otro lugar… yo he denominado la ‘explicación genética’ de Vygotski. Este método está construido sobre la suposición que los fenómenos psicológicos solo pueden ser entendidos al examinar la génesis de las unidades vivas completas del funcionamiento. Tanto la noción de génesis como la de unidad viva completa son esenciales para ello… Las ideas de Marx parecen haber jugado un papel central en llevarle a combinar las nociones de génesis y de unidad. Vygotski reconoció esta deuda con Marx: ‘Yo no quiero descubrir la naturaleza de la mente con parchar juntas un montón de citas. Yo quiero hallar cómo debe ser construida la ciencia, para abordar el estudio de la mente después de haber aprendido todo el método de Marx… Para crear tal método-teoría posible del modo científico generalmente aceptado, es necesario descubrir la esencia de las áreas dadas del fenómeno, las leyes de acuerdo con las cuales cambian, sus características cualitativas y cuantitativas, sus causas. Es necesario formular las categorías y conceptos que son específicamente relevantes a ellas –en otras palabras crear el propio El capital. Todo El capital está escrito de acuerdo con el siguiente método: Marx analiza una sola ‘célula’ viva de la sociedad capitalista –por ejemplo la naturaleza del valor. Dentro de esta célula él descubre la estructura de todo el sistema y de todas sus instituciones económicas. Dice que para un lego este análisis debe parecer una turbia maraña de pequeños detalles. Por cierto, debe haber pequeños detalles, pero ellos son exactamente los esenciales para la ‘micro anatomía’. Cualquiera que pueda descubrir lo que es una célula ‘psicológica’ –mecanismo que produce incluso una sola respuesta- hallaría por lo tanto la llave de la psicología como un todo (Cuadernos no publicados de Vygotski, citado en Cole y Scribner 1978, p. 8)” (Wertsch 1985b, pp. 5-6).

Según B. Lee, esta “combinación” de las nociones de “unidad” y de “génesis” parece como si la reorganización funcional puede ser referida como un constructo clave de la explicación genética de Vygotski (Lee 1985). Por lo tanto, “la discusión de este constructo a su vez lleva al tema de las unidades de análisis, ya que las unidades son las que subyacen a la reorganización” (Wertsch 1985b, p. 6). La idea de las unidades de análisis de la mente como noción clave de las similitudes de los métodos de Vygotski y Marx fue un tema de los participantes soviéticos del libro en colaboración del que hablo. Me refiero al artículo de Davýdov y Radzijovski, en especial a su descubrimiento del problema de “la célula primaria de análisis” (Davydov y Radzikhovski  1985, pp. 50-51) y al artículo de Zinchenko sobre las unidades de análisis de la mente de Vygotski (Zinchenko 1985, pp. 94-118).

Podría resumir las opiniones de los autores de este libro, que en esencia están de acuerdo, en que por lo menos hubo tres puntos principales conectados uno con otro sobre “la similitud de los métodos” entre Vygotski y Marx; génesis (la idea del desarrollo), el análisis funcional (reorganización estructural) y la idea del análisis no de ciertos elementos sino con unidades. Así, la construcción parece bastante lógica y parece cubrir todas las características principales del método de Vygotski, que aparece aquí como el principal método marxista.

Todo esto parece claro y hasta obvio. Parece que lo debido es aceptar esta postura como algo que refleja el problema de “Vygotski y el marxismo” de modo completamente correcto, como algo que está probado por las referencias a los textos de Vygotski. ¿Qué podría ser entonces más fuerte? Desde 1985 ningún artículo ha puesto en duda este cuadro de las relaciones de Vygotski y el marxismo.

Sin embargo, yo no puedo compartir este punto de vista. Además, tal abordaje del problema de “qué es marxista en la psicología de Vygotski” crea más dudas que respuestas. Ahora, trataré  formular algunas de esas dudas y mostrar algunas posibles respuestas.

El primer grupo de preguntas concierne a la cita de Vygotski presentada arriba.  Regresemos a ese pasaje y preguntemos: ¿cuál era el título del “cuaderno no publicado” del que fue tomada la cita? La respuesta es que se trataba de “El sentido histórico de la crisis psicológica”. Era no publicado para Cole y Scribner en 1978, pero en 1985 ya no era un cuaderno no publicado; fue publicado en las Collected Works de Vygotski en 1982. Me sorprendió mucho leer esa referencia en el artículo de Wertsch, porque pienso que, como editor del tema, podría haber hallado las referencias a las Collected Works de Vygotski en los artículos de los participantes soviéticos de ese libro, por ejemplo en el artículo de Davýdov y Radzijovski (Davydov y Radzikhovski 1985, p. 65) y en muchos otros lugares. Todo esto, desde luego, puede ser tomado como un pequeño error técnico y editorial, pero el problema es que la cita de Vygotski no es por completo correcta. En realidad, quien haya leído “El sentido histórico de la crisis psicológica” podría ver que la cita de Vygotski  hecha por Cole y Scribner en 1978 y repetida por Wertsch en 1985 es una suerte de combinación libre de tres lugares diferentes del texto de Vygotski, tomado y combinado en uno sin tomar en cuenta los contextos de su aparición.

Por supuesto, en principio, no tengo nada contra el método de combinar tres o hasta más citas en una sin hacer cambios radicales de su sentido, ya que esto es una práctica normal en la literatura científica, pero en tales casos el método normal es unir las citas con una serie de puntos. Tampoco tengo nada contra el cambio del orden original de las oraciones de la cita si éste no destruye la lógica. Pero, desafortunadamente lo que tenemos aquí no pertenece a esos casos. No es una cavilación o un error de investigación mío; la cita que critico está hecha de tal modo que destruye no solo el orden original sino el sentido del pensamiento de Vygotski. Así, debido al carácter principal de esos tres pasajes y su lugar principal en “El sentido histórico de la crisis psicológica” todo esto no puede ser ignorado. Regresemos directamente al texto de Vygotski y tratemos reconstruir estos contextos olvidados así como la lógica y el sentido perdidos de sus ideas. 

5.2 Método analítico y metodología de la ciencia

Al descubrir el problema de cuál metodología necesita la psicología para deshacerse de la herencia destructiva del empirismo teórico, Vygotski comenzó con una discusión del problema de las relaciones entre los métodos analítico y experimental en ciencias naturales dentro del marco del principio de la objetividad de tales análisis científicos. Tradicionalmente, esos métodos eran vistos como diferentes: un acopio de hechos experimentales y su análisis teórico con las abstracciones. Al hablar de eso Vygotski mencionó que “el método de análisis en ciencias naturales y psicología causal es que descubrimos un fenómeno, esto es, un representante típico de cierto dominio y la deducción de cierta declaración acerca de la totalidad de este dominio” (Vygotsky 1982, p. 402). Vygotski rechazó radicalmente este punto y explicó la similitud de esos métodos mediante diferentes modos. Primero, el análisis (abstracción) no es algo relativamente secundario al experimento. Por ejemplo, cuando descubrimos la propiedad de cierto gas ¿sobre qué bases llegamos a la conclusión de que esta propiedad es importante para los demás gases? Podemos hacer esta conclusión porque ya tenemos el concepto inicial de gas. Por lo tanto, “el análisis se halla en la base de cada experimento; cada experimento es un análisis en acción, y cada análisis es un experimento en el pensamiento. Por lo tanto, es mejor llamarlo método experimental  (Vygotsky 1982, p. 403). 

Aún más, la similitud del análisis científico y el experimento científico es que en el experimento “tenemos una combinación artificial de fenómenos en los cuales la acción de cierta ley puede ser vista en su más clara forma; esto es como poner una trampa a la naturaleza, el análisis en acción. La misma combinación artificial de fenómenos, pero basada en la abstracción mental, podemos crearla en el análisis (teórico)… Puede parecer que el análisis, como el experimento, distorsiona la realidad –crea condiciones artificiales para la observación. De aquí la demanda para la cercanía a la vida y la naturalidad del experimento. Si esta idea va más allá de una demanda técnica –no para asustar a lo que estamos buscando- deviene un absurdo. La fuerza del análisis está en la abstracción, como la fuerza del experimento está en la artificialidad (Vygotsky 1982, pp. 406-7). Y por último, la característica común del experimento y el análisis es que esos métodos no son los del descubrimiento directo sino del indirecto. “Del análisis del estímulo llegamos a la conclusión del mecanismo de la reacción, de la orden –al movimiento de los soldados, de la forma de la mesa- a las reacciones a ella” (Vygotski 1982, p. 407).

Así, esos problemas –el problema de la objetividad de los métodos y el problema del principal carácter indirecto de ellos- eran el contexto en el cual Vygotski citó las ideas de Marx del método con el cual está escrito El capital todo. Veamos lo que dijo en realidad Vygotski –aquí en especial voy a poner en itálicas las oraciones omitidas por Wertsch: 

Marx dice en esencia lo mismo cuando compara la fuerza de la abstracción con el microscopio y los reactivos químicos de las ciencias naturales. Todo ‘El capital’ está escrito de acuerdo con el siguiente método: Marx analiza una sola ‘célula’ viviente de la sociedad capitalista –por ejemplo la naturaleza del valor4 y muestra que es mucho más fácil descubrir el desarrollo del cuerpo que el de la célula. Dentro de esta célula él descubre la estructura de todo el sistema y de todas las formaciones económicas. Él dice que a un lego este análisis puede parecerle una maraña turbia de pequeños detalles. En efecto, pueden ser pequeños detalles, pero son exactamente esos, los que son esenciales para la anatomía microscópica. Cualquiera que sea capaz de descubrir lo que es una célula ‘psicológica’ –el mecanismo de una sola respuesta- por lo tanto podría hallar la clave de la psicología como un todo” (Vygotsky 1982, p. 407). Ahora, quiten lo que está marcado con itálicas, cambien las palabras “anatomía microscópica” por “micro anatomía” y “el mecanismo de una sola respuesta” por “el mecanismo que produce una sola respuesta” y después díganme si es posible reconocer el significado original de esas ideas de Vygotski. De todos modos, después de esas operaciones, resulta imposible saber de cual método, cual célula y cual clave hablaba Vygotski. 

4 Aquí Vygotski malinterpreta a Marx. En El capital la “célula” de la producción capitalista (no de la sociedad capitalista) es la mercancía, no el valor. 

Además, la idea de “célula” no es algo genuinamente marxista. Desde los tiempos de Aristóteles la noción de “célula” de hecho no es más que la consecuencia inevitable del método analítico conocido desde Galileo y Descartes. La “célula” es el “resto” no analizable del objeto que se obtiene cuando se ha usado el método analítico en él.

Una pequeña y particular ilustración de Vygotski de lo que es el método analítico, una analogía que como todas tiene una validez limitada, retirada del contexto concreto y reducida en esencia, fue transformada y presentada como la principal demanda metodológica, la expresión esencial del programa de la creación de la psicología marxista, el método de la aplicación del marxismo a la psicología. Debo enfatizar esto porque de acuerdo con Vygotski (y todo lector cuidadoso puede hallar una serie de lugares relacionados con este punto en “El sentido histórico de la crisis psicológica”) una aplicación directa y estricta del marxismo y su método filosófico  a la psicología con el objeto de construir una psicología marxista es una tarea imposible.

Pero esto no significa que la psicología marxista sea imposible; el problema era entender cuál psicología, de acuerdo con la opinión de Vygotski, podría ser definida como marxista.

5.3 Marxismo y metodología psicológica

Vygotski comenzó a discutir este problema con la afirmación que ningún sistema filosófico, incluido el marxismo, podría sustituir a la metodología en psicología. Por lo tanto, la única legitima contribución del marxismo sería la de ayudar a desarrollar la psicología general, la metodología de la psicología, la que vio como cierto enlace mediador (metodología-teoría mediadora) entre filosofía y ciencia. Cualquiera que ignorara la metodología científica concreta, volteando directamente a la metodología filosófica, inevitablemente “saltaría por encima del caballo al tratar montarlo” (Vygotsky 1982, p. 418). Así, la “inmediata aplicación de la teoría del materialismo dialéctico a los problemas de la ciencia natural, en particular la biología y la psicología, es imposible como lo es aplicarla inmediatamente a la historia o la sociología… Como la historia, la sociología requiere la especial teoría mediadora del materialismo histórico, que explica el significado particular de las leyes abstractas del materialismo dialéctico para un grupo particular de fenómenos. De modo similar, es indispensable una teoría de materialismo biológico, o de materialismo psicológico, como ciencia mediadora que explique la aplicación concreta de los principios abstractos del materialismo dialéctico a un dominio particular de fenómenos” (Vygotsky 1982, p. 418). El problema del marxismo y la psicología, decía Vygotski, es mucho más difícil que solo construir la psicología de acuerdo con el marxismo. La psicología necesita cierta metodología-teoría (meta teoría) de sí misma, pero no tomada estrictamente de la filosofía. Para la economía política, la historia y la sociología tal meta teoría mediadora (materialismo histórico) fue construida por Marx en El capital.

En este sentido la psicología necesita su propio El capital. En este contexto (y solo en este particular pero bastante importante) Vygotski dijo: “Para crear tales metodologías-teorías posibles en las ciencias generales es necesario descubrir la esencia del área dada de fenómenos, las leyes de sus cambios, sus características cualitativas y cuantitativas, su causalidad; para crear las categorías y conceptos relevantes a ellas –en otras palabras, para crear su propio El capital” (Vygotski 1982, p. 420). De acuerdo con Vygotski, la idea no es imponer los principios dialécticos a la naturaleza, sino hallarlos ahí. De modo similar a como El capital no fue la aplicación del materialismo dialéctico  a los problemas de la economía política y la sociedad, el futuro El capital en psicología fue visto solo como la posibilidad de expresar y describir sus propios objetos y leyes, pero no como la aplicación del materialismo dialéctico. En consecuencia, las categorías, conceptos y leyes  en este El capital deben ser psicológicos y no filosóficos (Vygotsky 1982, p. 420).

Así, tomando en cuenta el contexto de las ideas de Vygotski sobre El capital de Marx ¿podemos decir algo acerca de las similitudes en los métodos de Vygotski y Marx? De todas formas, no en el sentido presentado por Wertsch. Esta cita en particular no dice nada en absoluto de ella como de la anterior. Por otro lado, la cita de Wertsch está “combinada” de modo que tal “similitud” aparece de pronto. Parece como si primero, todo el método de Marx era ese que “permite la teoría-método” que buscaba Vygotski y, segundo, El capital estaba escrito por ese método. Esto significa que el sentido original de las afirmaciones de Vygotski está transformado en el  sentido absolutamente opuesto. Ello deviene más claro si damos una mirada al análisis crítico de Vygotski de la psicología marxista contemporánea.

Ya que la psicología marxista no tenía su propia metodología (materialismo psicológico), los psicólogos marxistas (como Kornílov) no podían ver la diferencia entre las epistemologías materialista e idealista y las teorías de la cognición psicológica (Vygotsky 1982, p. 411). Por lo tanto, la primera tarea era hallar esta diferencia, pero no hallarla mediante recortes de citas de Marx y Engels, sino de la psicología misma.

Recordemos que la creación de una nueva psicología marxista era la principal tarea de una generación joven de psicólogos soviéticos y que era una tarea oficial, y que Vygotski por supuesto no era el único involucrado en esas investigaciones. Vygotski rechazaba el modo de construir la psicología marxista que tomaba ciertas fórmulas de leyes dialécticas de la filosofía y explicaba los procesos psicológicos y sus leyes como manifestaciones concretas de las leyes universales de la dialéctica. Desde esta visión criticaba a Kornílov que no solo era uno de los líderes administrativos (como director del Instituto de Psicología Experimental) sino de los científicos de la psicología marxista en los 1920s (Kornilov 1930). La “psicología marxista” de Kornílov ya ha sido descubierta por la literatura moderna (van der Veer y Valsiner 1991, pp. 113-40), pero me gustaría señalar algunos temas aquí. Primero, el enfoque de Kornílov para la creación de la psicología marxista “a la luz del materialismo dialéctico” era muy típico de aquel tiempo. Entender la naturaleza de la consciencia era explicarla de acuerdo con el materialismo y la dialéctica. La principal idea era explicar la naturaleza “dialéctica” de los procesos y leyes psíquicos al presentarlos como ejemplos de leyes filosóficas fundamentales y universales tales como la ley de la penetración mutua de los opuestos, la ley de la transformación de lo cuantitativo en lo cualitativo y la ley de la negación de la negación. Así, en particular, los cambios en la percepción de las figuras descritos en la teoría de la Gestalt eran explicados de acuerdo con la ley de la transformación de la cantidad en calidad (Kornílov 1930, p. 255).

Por otro lado, el materialismo en psicología fue visto como una expresión concreta de la idea filosófica abstracta de la primacía de la materia. “En las creaturas vivas con un sistema nervioso altamente organizado, hallamos una clara expresión de aquellas reacciones internas de las actividades del cerebro que llamamos consciencia, pensamiento, psique. Así, eso que llamamos consciencia de la psique desde este punto de vista es indistinguible en su naturaleza de la materia… y no es más que una de las propiedades de la materia altamente organizada” (Kornilov 1930, p. 247). Las demás explicaciones de la naturaleza de la psique y la consciencia eran vistas  como materialismo ingenuo (Kornilov 1926) o de modo estricto como idealistas y metafísicas (Kornilov 1924).

5.4 Psicología marxista y psicología científica

Vygotski recordaba cómo una vez fue sorprendido por una pregunta que le hizo cierto científico occidental. La pregunta era “¿Qué psicología estudian ustedes en Rusia? Que sean marxistas todavía no explica qué clase de psicólogos son. Conociendo la popularidad de Freud en Rusia primero pensé en los adlerianos; ellos son marxistas, pero ustedes tienen una psicología bastante diferente, ¿no es cierto? Nosotros también somos social-demócratas y marxistas, pero igual somos darwinistas y copernicanos” (Vygotsky 1982, p. 434). Esa conversación alimentó el pensamiento y los argumentos de Vygotski contra el término “psicología marxista” como tal. Primero, así como la teoría de Darwin forma parte de la biología y la teoría de Copérnico es parte de la astronomía, debe haber una teoría concreta para determinar la estructura interna de la psicología. “Un historiador marxista nunca debería decir ‘una historia marxista de Rusia’. Él asumiría que la cosa estaba clara por sí misma ya que es sinónimo de ‘verdadero o científico’” (Vygotsky 1982, p. 434). Así, decir que los científicos de la URSS estudiaban psicología marxista sería eludir el tema. “A fin de cuentas, no hay psicología marxista como tal. Ello debe ser visto como una tarea histórica, no como algo dado. Pero, en el estado actual de las cosas, es difícil evitar la impresión de que hay una falta considerable de seriedad y responsabilidad científica alrededor de este título” (Vygotsky 1982, p. 433). Segundo, Vygotski tenía otro argumento contra el término “psicología marxista”. “La psicología marxista no es una escuela entre otras, sino la única verdadera psicología como ciencia. No puede haber otra psicología sino ésta (Vygotsky 1982, p. 435). 

De igual modo, el término ‘psicología marxista’ “coincidía con el de psicología científica en general, donde quiera y por quien fuera a desarrollarla” (Vygotsly 1982, p. 435). Aquellos que trataban construir la psicología marxista solo con hallar las ‘citas correctas’ de Marx y Engels, decía Vygotski, estaban mirando hacia el lugar equivocado, buscando cosas equivocadas y del modo equivocado. Miraban hacia el lugar equivocado porque los marxistas clásicos no se habían ocupado de los temas psicológicos y, por lo tanto, quizá no los podían haber resuelto correctamente. Ni Marx y Engels, ni Plejánov tenían tal verdad (Vygotsky 1982, p. 421). Estaban buscando el objeto erróneo porque pensaban que había respuestas claras a los problemas filosóficos y psicológicos, o fórmulas marxistas ya hechas aplicables a la psicología. Pero tal fórmula solo podía ser alcanzada como resultado del proceso teórico de la psicología misma. Sería un milagro hallar un sistema de puntos de vista psicológicos en el marxismo y en el pensamiento de Marx; sería como hallar una ciencia antes de la ciencia, antes de comenzarse a sí misma.

Y, por último, los psicólogos marxistas estaban buscando del modo equivocado, porque estaban bloqueados por su miedo a las autoridades marxistas. Para Vygotski, las ideas marxistas estaban mal usadas porque la “psicología marxista” adoptaba una postura dogmática y autoritaria que endurecía la crítica y prevenía la investigación científica libre. “El pensamiento está atado por el principio de autoridad; no son estudiados los métodos, sino los dogmas; la gente no está abordando el tema con espíritu crítico, libre e inquisitivo (Vygotsky 1982, p. 398).

En este contexto particular Vygotski escribió: “Yo no quiero… descubrir lo que la psique es cortando un par de citas, yo quiero aprender de todo el método de Marx, cómo construir la ciencia, cómo abordar la investigación de la psique" (Vygotski 1982, p. 421). Ahora podemos ver qué tan diferente es el significado original de esa idea de Vygotski de aquella que fue presentada por Wertsch. También podemos ver cómo esas tres citas de Vygotski estaban originalmente conectadas y cómo el método de cortar citas destruye su lógica y significado originales.

Sin embargo, creo que la afirmación de Vygotski respecto a la idea de la relevancia de la psicología marxista y de la psicología científica necesita ser vista no solo en el aspecto teórico-metodológico, sino también desde el aspecto histórico-ideológico. Me gustaría decir que la relación entre la filosofía del marxismo y la psicología en la URSS de los años 1920s y 1930s debe ser entendida no solo desde el punto de vista de sus “relaciones científicas”. En los 1920s la filosofía marxista era vista como la metodología de la ciencia, y la postura de Vygotski era, por supuesto, una de las más raras excepciones (para más detalles ver, por ej. Bauer 1968, Kozulin 1984, Joravsky 1989). Por otro lado, la tarea de crear una psicología objetiva era para Vygotski una tarea práctica, una de las tareas en el proceso de construir una sociedad socialista nueva. Las últimas páginas de “El sentido histórico de la crisis psicológica” estaban llenas de pathos romántico. “Nuestra ciencia no podría y no puede desarrollarse en la vieja sociedad… Al contrario, en la nueva sociedad nuestra ciencia estará en el centro de la vida… En realidad será la última ciencia en la historia de la especie humana. La nueva sociedad creará un hombre nuevo. Cuando uno habla acerca de remodelar al hombre como un rasgo indudable de la nueva especie humana, y de la creación artificial de un nuevo tipo biológico, esta será la primera y única especie biológica que se creará a sí misma” (Vygotsky 1982, p. 436).

La situación cambió en los 1930s cuando el marxismo fue visto cada vez más como una suerte de “ideología científica”. La situación general y el principio general que dominaba más y más podrían ser expresados no en la fórmula “la psicología científica real puede ser llamada psicología marxista”, sino en la fórmula “la única psicología científica es la psicología marxista”. De ahí seguía que  todas las demás teorías no eran científicas y algunas eran hasta anti científicas. El juego tenía nuevas reglas. Desafortunadamente no tengo la oportunidad para una discusión detallada de este tema, que ya ha sido discutido en la literatura (ver por ej., las excelentes obras de Bakhurst 1990, 1991, y de Yaroshevsky 1991, 1996). Por otro lado, debo decir que el contexto histórico de “El sentido histórico de la crisis psicológica” debe ser también tomado en consideración. De cualquier modo, al descubrir el problema de las relaciones del marxismo y Vygotski debemos tomar en cuenta el carácter dramático y hasta trágico de esas relaciones.

Tal vez aquí podamos hallar la respuesta a por qué “El sentido histórico de la crisis psicológica”, donde “Vygotski había establecido las bases de la psicología marxista” (Leont’ev 1990, p. 33) o, de igual modo, dio uno de los pasos hacia la fundación de esa psicología (Davydov y Radzikhovskii 1985, pp. 48-53) no fue publicado en el país de la psicología marxista. Como psicólogo, materialista y marxista, Vygotski no podía seguir esas nuevas reglas del juego y fue una de las víctimas de aquella formula (la única psicología científica es la marxista) al ser acusado de “carácter idealista no científico y anticientífico” en su teoría psicológica. En su libro, Rudnieva escribió acerca de las distorsiones paidológicas de Vygotski (Rudneva 1937). Al decir que “Vygotski estaba más que contento de llamarse a sí mismo marxista” (Toulmin 1978) deberíamos también decir que era una alegría triste.

Ahora vayamos a la siguiente “porción” de problemas concernientes al “cuadro clásico” de Vygotski y el problema de las similitudes de los métodos de Vygotski y Marx. La afirmación de que “las similitudes” en los métodos de la teoría de Vygotski y el marxismo pueden ser halladas en la “combinación de la noción de la génesis y la noción de unidad” (Wertsch 1985, p. 6) no puede ser tomada como completamente correcta. No puede ser considerada por completo como correcta debido a la ignorancia de la lógica interna del desarrollo de las ideas teóricas de Vygotski y de los principales estadios de su desarrollo.

Aquí el primer punto de mi crítica es que debemos analizar este problema desde el ángulo histórico, desde el punto de vista del desarrollo de la evolución teórica de Vygotski. Debo decir que la aparición de la idea del desarrollo (análisis genético de las funciones psíquicas), la idea del análisis estructural de la consciencia y el concepto de análisis con unidades deben ser referidos a diferentes periodos de la obra de Vygotski. Hasta un breve análisis comparativo de los principales textos de Vygotski lo muestra claramente. Tomemos, por ejemplo, la idea del desarrollo (génesis de las funciones mentales superiores). Como se vio antes (ver Capítulo III) durante el primer periodo de las ideas de Vygotski él estaba muy lejos de la noción del análisis del desarrollo tal como era presentado en el marxismo. En Psicología Pedagógica habló de un simple crecimiento más que del desarrollo en sí y puso gran atención a la complejidad creciente de los reflejos. 

La situación fue muy similar en el trabajo “Los métodos de la investigación psicológica y reflejológica”  (Vygotsky 1982, pp. 43-62). Además, no se puede hallar ninguna pista del “método genético” en 1925-26, en particular, en su programática “La consciencia como problema de la psicología de la conducta” (Vygotsky 1925a, pp. 175-98; 1982, pp. 78-89; 1997a, pp. 63-79). A pesar de esto, el análisis estructural-funcional fue uno de los más importantes aspectos metodológicos presentados en este artículo. Podemos ver, entonces, que la idea del análisis estructural-funcional (reorganización de las funciones mentales) apareció mucho antes que el principio del desarrollo y no con base en el marxismo, sino basado en el modelo teórico de “la consciencia en la estructura de la conducta humana”. No hace falta decir que nada podemos hallar acerca del análisis con “unidades” en esas obras ya que ésta era una de las últimas ideas de Vygotski, que a su vez llegó a ser una de las principales en su Pensamiento y Habla (Vygotsky 1934b, p. 9; 1987b, pp. 46-47). Podemos decir lo mismo de la idea de los orígenes sociales de la mente

En su forma completa esa idea fue presentada en los inicios de los 1930s en El desarrollo de las funciones psicológicas superiores (Vygotsky 1960, pp. 13-23; 1981). “Parafraseando una postura bien conocida de Marx podríamos decir que la naturaleza psicológica de los humanos representa el agregado de las relaciones sociales internalizadas que han devenido funciones para el individuo y formas de su estructura… Todas las funciones mentales superiores son relaciones sociales interiorizadas. Su composición, estructura genética y medios de acción –en pocas palabras, toda su naturaleza- es social. Incluso cuando regresamos a los procesos mentales, su naturaleza permanece quasi-social… No queremos decir que este sea el significado de la postura de Marx, pero vemos en esta expresión la más completa expresión de aquello hacia lo que la historia del desarrollo cultural nos lleva… El principal problema es mostrar cómo la respuesta individual emerge de las formas de vida colectiva” (Vygotsky 1981, pp. 164-65).

El punto más importante al analizar la idea que parece ser marxista y la que es marxista, es que ella apareció gradualmente y con base en la psicología y no como resultado de la aplicación estricta de las formulas marxistas a la psicología, y no fue tomada del marxismo. Ahora mostraré brevemente el movimiento de las ideas y posturas de Vygotski a esta idea y la lógica de su aparición en la psicología de Vygotski.