Psicología marxista y método dialéctico
Mohamed Elhammoumi
En: Ian Parker (Ed.), Handbook of Critical
Psychology (pp.271-79). London: Routledge, 2015
Traducción: Efraín Aguilar
Mucho
del reciente trabajo en la teoría cultural-histórica está relacionado con la mediación, las zonas del desarrollo proximal, la
actividad, el lenguaje, la formación de conceptos y el pensamiento abstracto, por
nombrar algunos temas clave. Estos trabajos han dado un importante correctivo a
la psicología positivista, que se ha concentrado en describir función, estructura
y procesos dentro de las cabezas individuales. A través del esfuerzo de los
investigadores de la teoría de la actividad cultural-histórica, está cada vez
más claro que cualquier relación con el desarrollo de las funciones mentales
superiores humanas debe ser estudiada dentro de su contexto social, histórico y
cultural. Las funciones mentales superiores del hombre están desarrolladas históricamente,
formadas socialmente, compartidas culturalmente y esculpidas por las relaciones
sociales de producción. Esto lleva a la urgente necesidad de una teoría del
desarrollo integrada. Hegel fue uno de
los primeros teóricos del desarrollo que ofreció una teoría sistemática del
desarrollo conceptual. Su dialéctica puede ser vista como una teoría general de las funciones mentales superiores humanas.
Hay similitudes estructurales importantes
entre la psicología del desarrollo y la psicología dialéctica de las funciones mentales
superiores. Para lograr estas similitudes, necesitamos re-formalizar la
dialéctica idealista de Hegel y la dialéctica materialista de Marx, un proyecto
en verdad impresionante en el que se han hecho pocos intentos (por Wallon,
Politzer, Vygotski y Seve, entre otros). Mi propia postura es que la dialéctica
materialista de Marx es por completo incompatible con la dialéctica idealista
de Hegel, propuesta con la que Marx y otros han estado en franco desacuerdo.
En este capítulo se da mucha atención a los conceptos centrales de la
dialéctica tales como negación, contradicción, ‘Aufheben’ (preservación y trascendencia simultánea de categorías en los procesos
de cambio), negación de la negación, conflicto, cantidad, cualidad, unidad y lucha.
La dialéctica de Hegel se relaciona con la dinámica de las estructuras conceptuales
mientras que la dialéctica de Marx tiene que ver con las estructuras sociales reales.
Para Hegel, la dialéctica es una teoría general del desarrollo de las
estructuras conceptuales. Hegel decía ‘Donde quiera que haya movimiento, donde
haya vida, cada vez que algo se lleve a cabo en el mundo real, hay dialéctica
en el trabajo’ (Hegel 1892: 148). Descubrió y presentó ‘algunas’ de las
herramientas necesarias para comprender
la dialéctica y la dialéctica de la naturaleza, la sociedad y el pensamiento, y
por ello deberíamos estarle agradecidos. Pero Hegel también oscureció y distorsionó
otros aspectos necesarios del método dialéctico al presentar su ‘dialéctica’ de
un modo idealista clásico, subordinando lo material a lo ideal. Hegel reveló
muchas leyes de la lógica dialéctica y las
enterró bajo el marco idealista del desorden. Aplicó la dialéctica a la consciencia,
la historia, las cateorías lógica y a la historia de la filosofía. La Fenomenología de Hegel está en especial relacionada con el desarrollo
del conocimiento, así como con los estadios de la consciencia.
Los años 1905–1925 vieron un intento de usar la dialéctica hegeliana marxista
como un instrumento del conocimiento y la acción. Estos años fueron los más
importantes para el progreso del pensamiento marxista. La lucha de este periodo,
como la describió Lenin en 1908, fue un intento de restaurar los conceptos dialécticos
de totalidad y proceso histórico. A la luz de estas luchas, Vygotski intentó
construir una psicología estructurada en el método científicamente basado del materialismo
dialéctico de Marx. El método dialéctico
materialista es sobre todo un análisis del pensamiento lógico de las contradicciones
y un análisis de las relaciones sociales. Posee una rica comprensión del
desarrollo histórico de las funciones mentales superiores del hombre como un
proceso contradictorio. La tarea de la psicología marxista es descubrir las
posibilidades del desarrollo de las habilidades intelectuales humanas. El
análisis cultural-histórico de Vygotski de las funciones mentales superiores
del hombre fue, por lo tanto, uno dirigido a un Aufheben dialéctico, capaz simultáneamente de negar, preservar, remplazar
y trascender las contradicciones entre las funciones mentales superiores del
hombre y la totalidad concreta de la realidad concreta viviente. La introducción
de la dialéctica en el programa de investigación de la actividad cultural-histórica
abre un terreno fértil para el estudio de las funciones mentales superiores humanas.
En este sentido, cultura, historia y factores sociales serán tratados como
variables activas, no solo como un cheque en blanco firmado y endosado por la historia,
la cultura, lo social y la sociedad. Este capítulo se refiere a los nombres de
Hegel, Feuerbach y Marx como hitos en la historia del método dialéctico y de la
interpretación de las funciones mentales superiores del hombre. Es a través del
uso del método dialéctico que la teoría
de la actividad cultural-histórica superará las actuales versiones dominantes que
enfatizan la oposición entre descripción y explicación de las funciones
mentales superiores humanas.
Liev
Vygotski
En
las últimas tres décadas, Liev Vygotski fue celebrado como uno de los más importantes psicólogos de nuestro tiempo. Pero
el método dialéctico de Vygotski es relativamente desconocido en el mundo de habla
inglesa (ver Blunden 1997; Parker 2007; Seve 1975, 1968/1978, 1989, 2002,
2008;). Aunque varios de sus escritos fueron asequibles durante las últimas dos
décadas, sus principales obras sobre el método dialéctico aplicado, en particular
‘Psicología
educativa’ y ‘Estudios sobre la historia de la
conducta: Mono, hombre primitivo y niño’, no han
recibido mucha atención, lo cual es desafortunado. El abordaje de Vygotski a la
psicología, basado en la filosofía materialista histórica dialéctica, es subutilizado.
El método dialéctico es un potencial instrumento metodológico de investigación de
las funciones mentales superiores del hombre, y llegó a ser una regla fundamental
en los estudios psicológicos de Vygotski. El método dialéctico llevó a Vygotski
a adoptar un abordaje de ‘verdad’ y conocimiento,
negándose a aceptar cualquier hecho psicológico sin validación experimental. Como
consecuencia de su constante cuestionamiento crítico de los valores y fundamentos
de las tendencias contemporáneas de la psicología soviética, Vygotski hizo una
serie de enemigos durante su vida (encarnados en el surgimiento del estalinismo,
la dialéctica mecanicista, el marxismo positivista, el ‘diamat’, la versión de Stalin
de la teoría marxista, etc.). El método dialéctico ve la realidad social
concreta humana como un conjunto de procesos complejos, cambiantes, contradictorios.
Estos procesos complejos están incrustados en la actividad práctica humana de
la totalidad de la vida social. La totalidad de la vida social es una entidad
en movimiento en la lucha para realizar su propia naturaleza.
La psicología, vista a la luz del materialismo histórico, sirve al doble
propósito de demostrar la naturaleza de las relaciones sociales de producción de
una sociedad dada, y promueve soluciones que tienen relevancia para las
condiciones concretas de la vida real. Por lo tanto, la dialéctica es el
análisis concreto de las condiciones concretas. En este sentido, el propósito
de la psicología no solo es adaptar al individuo a una sociedad, cultura y modo de pensamiento dados,
o aclarar los mecanismos por los cuales tal adaptación es posible, sino también
el enfatizar la consciencia como parte de la actividad humana (en lugar de la
conducta), y promover la consciencia, el desarrollo potencial individual y el
cambio social. Vygotski afirmó que un cambio social del modo de producción, la eliminación
de la propiedad privada, un cambio en las relaciones sociales, la estructura de
clase, las instituciones y la división del trabajo pueden elevar las funciones
mentales superiores humanas y reducir las tensiones entre las clases sociales.
Tales transformaciones allanan el camino para el desarrollo del potencial
cognitivo humano.
Las
ideas de Vygotski en su contexto
Bajo
la dirección de Liev Vygotski, comenzó un nuevo paradigma en psicología en el Instituto de Psicología de Moscú, con el nuevo
experimento social creado conocido como URSS. Mientras Vygotski y sus colegas eran
decididamente marxistas, buscaron abrevar de las obras filosóficas de notables figuras
como Kant, Hegel, Spinoza, Feuerbach, Marx, Engels, Lenin, Wallon y Politzer, por
nombrar algunos. Se puede hallar tres actividades comunes que impregnan las
obras de los psicólogos soviéticos: 1) un redescubrimiento y comprensión de las
obras de Marx; 2) una comprensión reconstruida del paradigma de investigación
de Marx; y 3) una exploración de las mediaciones que hacen posible los cambios del
desarrollo de la sociedad, la economía, la cultura, las funciones mentales
superiores, la personalidad y la consciencia.
Mientras el programa de investigación de Marx demostró ser el núcleo de
la psicología soviética, los psicólogos soviéticos incorporaron las fuerzas de
la psicología alemana, francesa, estadunidense y otras del mundo. Es en este contexto
que propongo la incorporación del logro avanzado del paradigma de investigación
de la actividad cultural-histórica. La unificación de estos logros dará un
mayor poder explicativo al proyecto
incacabado de la psicología marxista (psicología científica) y una mejor fórmula
para la acción práctica en la educación, el aprendizaje, la crianza, el
progreso social y el desarrollo humano.
La propuesta de Marx, que el individuo humano crea su naturaleza mediante
la práctica social, devino para Vygotski y los psicólogos marxistas (Wallon,
Politzer, Seve, entre otros) una serie de principios teóricos guía. Vygotski, como
Marx, se alejó de la concepción del individuo como una agencia autónima y basó
su teoría en la concepción de Marx del individuo social como un conjunto de
relaciones sociales. Los individuos sociales no solo producen los medios y las
condiciones de su propia vida y viven bajo esas condiciones, sino que producen las
condiciones bajo las cuales viven. Vygotski participó en el desarrollo de un
marco teórico para la realidad de dos lados de los individuos sociales no solo
como sujetos a sus condiciones de vida, sino creándolas simultáneamente.
Vygotski defendió los principios sociales, históricos y culturales basados
en el materialismo histórico dialéctico. Desafortunadamente, por razones políticas,
el proyecto de psicología marxista de los 1920 sufrió muchos retrasos, quedó en
estado latente a mitad de los 1930, y fue llevado a una muerte lenta en 1936. En
los 1960 el proyecto de la psicología marxista fue revivido después de las
revueltas sociales abortadas en mayo de 1968. También por ese tiempo, Lucien
Seve publicó sus ideas en el monumental ‘El hombre en la teoría marxista y la Psicología
de la Personalidad’. El libro aborda nuevos conceptos clave en psicología
desde una perspectiva materialista histórico dialéctica. Seve nunca ocupó un
puesto docente universitario, pese a sus convicciones marxistas. Su situación
en el Partido Comunista Francés así como en las universidades y academias
francesas pasó desapercibida. Sus puntos de vista fueron marginados. Las ideas
psicológicas de Seve fueron moldeadas por la lucha social de los 1960; él era un marxista y sus ideas teóricas
y conceptuales estaban muy influidas por los escritos de Marx. Para comprender
el proyecto inacabado de la psicología marxista, es útil examinar diferentes
versiones de interpretación del marxismo desde la muerte de Marx hasta el
marxismo chino actual.
El
método dialéctico y la psicología
Vygotski
vio la dialéctica como un marco para estudiar el desarrollot de las funciones
mentales superiores. Para Vygotski, ‘El desarrollo no avanza hacia la socialización,
sino hacia la conversión de las relaciones sociales en funciones mentales’
(1981: 165). El desarrollo no es transformación sino cambio. Sus lecturas de Hegel,
Marx, Engels y Lenin, entre otros, le dieron las herramientas intelectuales necesarias
para ver las deficiencias del positivismo y la necesidad de investigar la
actividad humana dentro de los entornos social, histórico y cultural. Fue la
combinación por Vygotski de estas varias mediaciones – social, historical y cultural
– en un todo complejo lo que hizo a su marco teórico digno y prometedor. La dialéctica
es el motor de la psicología y su fuerza impulsora. En esta conexión, Wallon decía
que
Es la dialéctica la que ha dado a la psicología
su estabilidad y significado. . . . A través de la dialéctica la psicología es
capaz de ser al mismo tiempo una ciencia natural y una ciencia humana. . . . La
dialéctica marxista ha permitido a la psicología comprender el organismo y su medio,
en constante interacción, como un todo único y unificado. Y finalmente, en la dialéctica marxista la
psicología tiene una herramienta para explicar los conflictos a partir de los
cuales el individuo debe desarrollar su conducta y su personalidad. (1951/1963: 34)
En
el corazón de la dialéctica marxista está la idea de la contradicción. La contradicción
es la llave de todos los otros conceptos y categorías del desarrollo dialéctico.
La contradicción es a la dialéctica lo que la materia al materialismo. Vygotski,
como Wallon, organizó sus observaciones psicológicas e investigaciones experimentales
al presentar el desarrollo cognitivo del
niño como una sucesión de estadios (con respecto al desarrollo del lenguaje, el
habla, los conceptos, el intelecto, etc.). Algunos de estos estadios están
marcados por el predominio de, por ejemplo, la cognición social sobre el
razonamiento hipotético-deductivo, mientras que otros aparecen caracterizados en
cambio por la primacía de las habilidades prácticas sobre las habilidades abstractas.
La personalidad del individuo se desarrolla en esta sucesión discontinua y
competitiva entre la prevalencia del desarrollo cognitivo y el de la personalidad.
Vygotski así articuló conceptos tales
como habla, lenguaje, formación de conceptos y emoción desde una perspectiva
materialista dialéctica histórica. Su concepción de los estadios implicó la idea
de Aufheben, así como la de regresión, contraria a otros modelos de la psicología
del desarrollo (tales como los de Piaget, versiones de la teoría de la actividad
y de la teoría cultural-histórica).
Mientras insistía sobre la discontinuidad, el cambio, conflicto,
contradicción y crisis que subyacen al
desarrollo de las funciones mentales superiores, Vygotski demostró su fidelidad a las tesis hegelianas y
marxistas de la dialéctica. Al respecto, Vygotski, como Wallon, valoró los
conceptos dialécticos marxianos de realidad material, consciencia, práctica, conflicto, contradicción,
crisis, Aufheben, negación, negación de la negación, cantidad, cualidad, discontinuidad
y cambio sobre la transformación, la interacción,
continuidad, adaptación, equilibrio, enriquecimiento y reemplazo de conceptos. Cada
estadio del desarrollo humano es el producto de contradicciones inherentes o
implícitas en los estadios precedentes. Los avances científicos a menudo
incluyen cambios conceptuales. Estos cambios conceptuales corresponden a la
naturaleza acumulativa de la dialéctica, en la cual nada se pierde en el camino
a un nivel superior. El crecimiento se ve estimulado por el reconocimiento de
las contradicciones entre lo que una teoría pretende hacer y lo que realmente
hace. Esto es lo que Vygotski debía decir acerca de la conducta, por ejemplo: es
‘un proceso dialéctico y complejo de la lucha entre el hombre y el mundo, y
dentro del hombre’ (1997a: 53). La vida de cada individuo representa el camino
hacia la conversión de las relaciones sociales en funciones mentales superiores,
y a fin de cuentas el camino hacia sí mismo. Es a través de las relaciones sociales
que nos desarrollamos en nosotros mismos. Marx vio la dialéctica como un marco metodológico,
esto es mejor ejemplificado en Die Grundrisse y Das
Kapital, que delinean dos de sus teorías centrales: la de
plusvalía y la concepción materialista de la historia.
Es la dialéctica la que da a la psicología su base científica, significado
epistemológico, guía ontológica, herramientas conceptuales, claridad teórica y razón
lógica y metodológica. La psicología es el estudio del individuo humano dentro
de su rica red de relaciones sociales. Engels decía que ‘la dialéctica. . . es la
ciencia de las interconexiones’ (1940:
26). Luria lo dice de modo elocuente:
Vygotski supone que los procesos mentales
superiores son de origen social, y que la unidad básica de la conducta
consciente humana no se halla en los reflejos incondicionales o condicionales.
. . En su lugar, fue propuesto un método nuevo: salir del organismo y tratar de
hallar las unidades básicas de la conducta humana consciente en la relación del
sujeto con el medio social, al tratar estas relaciones como un rasgo esencial de los procesos mentales humanos.
(1987: 87)
En
conexión, Politzer decía que ‘La psychologie ne détient donc nullement
le “secret” des faits humains, simplement parce que ce “secret” n’est pas
d’ordre psychologique’ [La psicología de ningún modo posee el “secreto”
de los asuntos humanos, solo porque este “secreto” no es de orden psicológico] (1929:
170). Wallon hacía exactamente lo mismo cuando decía que:
La psicología de ningún modo es única al
respecto. El materialismo dialéctico es relevante a todo el reino del
conocimiento, así como al reino de la acción. Pero la psicología, principal fuente
de las ilusiones antropomórficas y metafísicas, debe, más que muchas otras
ciencias, hallar en el materialismo dialéctico su base normal y principios guía.
(1951/1963: 34)
Los
argumentos de Vygostski por una psicología marxista son bastante consistentes
con los puntos de vista de Wallon y Politzer. Vygotski creía que el
materialismo dialéctico tiene las herramientas conceptuales necesarias para
cerrar la brecha entre los procesos mentales superiores humanos y la
consciencia, y su base social, histórica y cultural.
Aplicación
del método dialéctico por Vygotski
El
método dialéctico aplicado por Vygotski en su estudio ‘Pensamiento y
habla’ mostró que cada estadio del desarrollo del
habla da origen a un estadio sucesivo, lo que se dice una negación. El proceso dialéctico del desarrollo del habla se mueve del habla social
(tesis), al habla privada (antítesis) y al habla interior (síntesis). Cada
nuevo estadio del desarrollo del habla reemplaza e incorpora el estadio negado.
Este proceso dialéctico es mejor descrito por el concepto de Hegel Aufheben (que combina la preservación y la eliminación de un concepto en un
proceso dialéctico). A través del doble aspecto de la negación dialéctica (negación
de la negación) y del Aufheben, se progresa, lo que lleva un estadio nuevo, superior, avanzado, más
complejo. El desarrollo mental superior no debería ser visto como un mero
proceso de acumulación (expresado como la deducción de la teoría psicológica reductiva),
sino como negación dialéctica, que preserva los logros y los reemplaza de una
manera conceptualmente radical. Por ejemplo, no se espera que la teoría explique
con éxito solo lo que su predecesor pretendía explicar; también debería tratar
con fenómenos inesperados. Los avances científicos, así como los cambios sociales
e históricos, a menudo incluyen cambios conceptuales dramáticos, más que el enriquecimiento
y reemplazo de los conceptos en la perspectiva hegeliana.
Método dialéctico:
confrontar los cambios
El mejor modo para entender a Liev Vygotski es ir más allá filosófica, epistemológica y ontológicamente.
En el sistema ontológico-epistemológico, la psicología se basa en la presunción
que la naturaleza humana se logra solo cuando los individuos humanos se reconocen
mutua e igualmente. Los individuos están llenos de potencialidades en espera de
que las condiciones correctas sean establecidas. En este sentido, Vygotski
decía que,
Marx con frecuencia se detiene en el tema de la
corrupción de la personalidad humana provocada por el crecimiento de la sociedad
industrial capitalista. En un extremo de la sociedad: la división del trabajo intelectual
y el físico, la separación de la ciudad y el campo, la explotación despiadada del trabajo
infantil y femenino, la pobreza y la imposibilidad de un desarrollo libre y pleno
del potencial humano completo, y en el otro
extremo: ociosidad y lujo; no solo todo esto resulta en el único tipo humano
que se diferencia y fragmenta en varios
tipos de clases sociales separadas y en
agudo contraste entre ellas, sino también en la corrupción y distorsión de la
personalidad humana y su sometimiento a un desarrollo inadecuado, uilateral en todas estas diferentes variantes
del tipo humano. (1994: 176)
Mientras
el desarrollo del potencial humano sea interrumpido por la injusticia social, la
opresión social, la depresión económica, la agitación social, la discriminación,
el desempleo, la pobreza, el hambre, la segregación, el racismo, el gueto urbano,
la guerra, la colonización y los efectos de la realidad concreta externa represiva;
el desarrollo intelectual human será inevitablemente afectado. Para comenzar a
lidiar con estos problemas urgentes, Vygotski sugirió dos soluciones: primero, que
la psicología marxista sea tratada como una visión del mundo en que la
actividad humana es vista como una totalidad, como un todo interdependiente; segundo,
que las funciones mentales superiores humana y el comportamiento gobernado por
reglas derivan de la escala macro-social, no de la agencia hipotética dentro
del organismo o procesos hipotéticos que son internos al individuo. En este sentido,
la psicología marxista se preocupa no solo de entender la actividad humana (en
vez de la mera ‘conducta’) sino también de la actividad humana cambiante. Aquí,
la psicología marxista difiere de otras tendencias psicológicas sobre todo en términos
de la unidad de análisis. Su unidad de análisis son ‘las relaciones sociales de
producción’. El concepto ‘relaciones sociales de producción’ es el núcleo de la
psicología marxista, como lo fueron las ‘relaciones de producción’ para Karl
Marx, ‘consciencia colectiva’ para Emile Durkheim, ‘compartido social a priori’
para Georg Simmel y ‘orientaciones de valor’ para Talcott Parsons.
El centrarse en las ‘relaciones sociales de producción’ como unidad de
análisis permanece subestimado y sub-utilizado teórica, conceptual y metodológicamente,
como un marco para comprender la compleja dinámica, naturaleza, estructura y
función de las funciones mentales superiores humanas. Esta unidad de análisis aleja
la psicología del dualismo cartesiano, del idealismo mentalista, del materialismo
mecanicista y del individualismo cognitivista predominantes en la psicología
actual. Estas últimas tendencias culpan a los problemas personales dentro de
las cabezas de los individuos más que a su realidad social concreta viviente. Ellas
ven también la actividad individual como reducida a una acción racional interesada.
La filosofía materialista dialéctica histórica que subyace a la psicología marxista
es una teoría de la historia del individuo (dialéctica histórica individual) y de las leyes de la reproducción y transformación de las relaciones
sociales. Las funciones mentales superiores del hombre son reguladas por las
relaciones sociales de producción, que generan pautas de personalidad estándar,
estructuran formas de pensar y organizan modos de actuar. La sexta tesis de Marx
sobre Feuerbach, que la esencia humana es ‘un conjunto de relaciones sociales’,
significa que los individuos son el producto de sus relaciones sociales reales.
El creciente eclecticismo y estrechamiento del terreno de exploración e
investigación de las funciones mentales superiores humanas, significa que hay un
‘peligro inminente de convertirse en una no-ciencia en el mejor de los casos, y
sin sentido en el peor’ (Van der Veer and Valsiner 1994: 35). Dentro de la
psicología soviética han sido ofrecidas varias teorías (reactología, reflejología,
pavlovismo, psicoanálisis, etc.) como alternativas a la psicología clásica, su
crisis y afirmaciones. Al inicio, la psicología soviética trató reconciliar el
marxismo y las diferentes tendencias de la psicología burguesa. Esta reconciliación
llevó a la unidad de los opuestos, que resultó en la eliminación de la tensión dialéctica.
Lo que se llama ‘dialéctica’ no está basado en la contradicción, la lucha de
opuestos o la negación, sino en la dialéctica de ponerlas juntas, y todas las formas
de vida se mueven hacia el equilibrio. Estas versiones de la dialéctica de ‘poner
juntos’ habían sido predicadas por Louis Althusser (1965/1970), Gerald Allan
Cohen (1978) y Leszek Kolakowski (1978). La dialéctica es reducida a la ley de
la lógica, y aquí solo las declaraciones se contradicen entre sí, no las acciones.
Este tipo de dialéctica que elimina la lucha de opuestos también está en la
base de gran parte del postmodernismo. Es una dialéctica sin contradicción. Una
dialéctica basada en el equilibrio como concepto ve el desarrollo como una sucesión de desequilibrio y re-equilibrio, y
la contradicción será gradualmente eliminada a medida que se logra el equilibrio.
La dialéctica es la fuerza impulsora de la historia. El pensamiento dialéctico
es descrito como una actividad específica que incluye propósitos humanos con referencias temporales definitivas a cosas en movimiento (Hook 1929: 85). Esto significa que el pensamiento dialéctico busca aclarar
y no explicar.
La dialéctica:
sostiene que. . . el pensamiento humano se desarrolla
de un modo caracterizado por. . . la
triada dialéctica: tesis, anti-tesis, síntesis. Primero, alguna idea o teoría o
movimiento es dado, lo que puede ser llamado ‘tesis’. Tal tesis a menudo produce oposición, porque probablemente será, como
la mayoría de las cosas de este mundo, de valor limitado: tendrá sus puntos
débiles. Esta idea opuesta o movimiento es llamado ‘anti-tesis’ porque se
dirige contra la primera, la tesis. La lucha entre la tesis y la anti-tesis continúa
hasta que se desarrolla alguna solución que, en cierto sentido, va más allá de
la tesis y la antítesis al reconocer el valor relativo de ambas, por ej., al
tratar preservar los méritos y evitar las limitaciones de ambas. Esta solución,
que es el tercer paso, es llamada ‘síntesis’. Una vez lograda, la síntesis a su
vez puede llegar a ser el primer paso de una triada nueva dialéctica. . . procederá
a un nivel superior. (Popper
1940: 404–405)
Conclusiones
Como
líder de la psicología marxista, Liev Vygotski jugó un papel importante en la
formulación de conceptos psicológicos a la luz del materialismo dialéctico
histórico y en allanar el camino hacia la fundación de una psicología marxista.
Sus escritos son una obra germinal centrada en las ideas principales de: ‘¿Quién
es un individuo humano? ¿Qué es la realidad social? ¿Cómo se forma la realidad? ¿Cómo son
construidas las funciones mentales superiores del hombre? ¿Qué es la
consciencia? ¿Qué es la personalidad?’ La respuesta a estas preguntas no puede
ser hallada en una psicología científicamente manejada basada en la idea del individuo
como un objeto de manipulación. La respuesta puede ser hallada en un estudio
científico del individuo dentro de la rica red de relaciones sociales de la
totalidad concreta de la realidad. La teoría del materialismo histórico dialéctico
es adecuada para abordar los temas descritos antes. Aunque Vygotski toca muchos temas e ideas originadas
de Hegel, Marx, Engels y Lenin, entre
otros, no pudo sistematizarlos en un marco teórico integral unificado. La
principal dificultad está en la ambigüedad sin esperanza de integrar conceptos
filosóficos marxistas en conceptos
psicológicos (por ej., el ascenso de Marx de lo abstracto a lo concreto, el
pseudoconcepto y el concepto científico de Vygotski, el concepto de potencialidad
de Marx y la zona de desarrollo próximo de Vygotski). La psicología está
necesitada de sus propios conceptos, categorías, métodos, unidades de análisis
y teoría unificada para desarrollarse como ciencia. La dialéctica pone a la
psicología sobre sus pies y la guía hacia una ciencia que enfatiza el potencial
humano, la creatividad y el desarrollo.
El método dialéctico penetra la realidad concreta, descifra su
estructura y la ve en su concreción (Ollman and Smith 2008; Seve 2008). Esta es
la dialéctica, una teoría familiar de acuerdo
con la elaboración conceptual de Hegel y la interpretación materialista
dialéctica e histórica de Marx. La dialéctica como método está bien elaborada por Marx en su teoría de la concepción
materialista de la historia. La psicología de ningún modo tiene el secreto de
los asuntos humanos, solo porque este secreto no es de orden psicológico
(Politzer 1929/1969), sino del orden de la totalidad concreta del hombre. La
concepción dialéctica de la totalidad concreta pone más peso en las relaciones sociales
de producción. La dialéctica es el único método capaz de comprender y
reproducir la realidad y capturar la verdadera consciencia en su totalidad
dentro de la realidad concreta. Ésta última regula las relaciones sociales de
producción. Las relaciones sociales de producción gobiernan los asuntos
psicológicos humanos. La relación social es la célula de la vida mental humana,
y la totalidad de la vida mental humana deviene reproducible a través de las
relaciones sociales de producción. Un análisis concreto de las relaciones
sociales de producción y de todas las demás fuerzas sociales juega un papel central
en el campo de fuerzas cambiante que es la historia social cultural. En otras palabras, ayuda a
comprender las interconexiones de la manera más amplia y profunda posible, y a concebir
la realidad histórica social cultural de la vida mental humana como un todo unificado.
La dialéctica de Hegel y la de Marx pueden ser herramientas útiles, fructíferas
en nuestra búsqueda para entender la totalidad humana concreta y para la ‘psicología
crítica’ marxista. La presente totalidad concreta de la realidad social está
embarazada de la sociedad futura, y la dialéctica es su partera.
Otras
lecturas
Hook,
D., Mkhize, N., Kiguwa, P., Collins, A., Burman, E., and Parker, I. (eds)
(2004) Critical
Psychology. Lansdowne, South Africa: UCT Press.
Parker, I., and Spears, R. (eds) (1996) Psychology and
Society: Radical Theory and Practice. London:
Pluto Press.
Seve, L. (1978) Man in Marxist Theory and the Psychology of
Personality. Hassocks: Harvester Press.
Vygotsky, L. S. (1997) ‘The historical meaning of the crisis in
psychology: a methodological investigation’, in The Collected
Works of L. S. Vygotsky, Volume 3. New
York: Plenum Press.
Recursos
de la red
Lev
Vygotsky Archive: http://www.marxists.org/archive/vygotsky/
Psychology
and Marxism: http://www.marxists.org/subject/psychology/
Referencias
Althusser,
L. (1965/1970) For
Marx. New York: Vintage Books.
Blunden, A. (1997) ‘Vygotsky and the dialectical method’,
http://webpages.charter.net/schmolze1/vygotsky/dialectical.html
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Kołakowski, L. (1978) Main Currents of Marxism: Its Rise,
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